Alimarket: Estamos asistiendo a una recuperación económica después de años de crisis ¿Están notando una mayor inversión y un aumento de los proyectos?

Alberto Fantova: Sin duda. Estamos observando como el sector retail en general está retomando la senda de la inversión en nuestro país.

Tenemos la suerte de estar trabajando con muchos retailers en sus nuevos conceptos y formatos. Espacios adaptados a las necesidades de un nuevo consumidor que espera que en la tienda “pasen cosas”: showcookings, educación nutricinal, recetas o maridajes, zonas de cata de producto y restauración, atención personalizada….

Una auténtica “re-evolución” de la tienda física en la que la calidad primará sobre la cantidad, consecuencia clara del crecimiento de la compra online que garantiza tiempo y comodidad frente a la tienda física que ofrece emoción y trato personalizado.

A.: ¿Qué porcentaje de su negocio supone la comercialización de mobiliario y estanterías? ¿A qué otros sectores se dedican y en qué medida?

A.F.: Hemos diversificado mucho nuestro negocio y hoy ofrecemos soluciones a retailers y marcas en todos los sectores, acompañándoles en sus planes de expansión nacional e internacional y aportándoles valor con productos innovadores y servicios integrales.

Nuestra capacidad productiva nos permite ofrecer soluciones multimaterial, metal, madera, metacrilatos, plásticos o cartón, integrando a su vez tecnología, iluminación y resolviendo necesidades de accesibilidad y sostenibilidad.

En la actualidad ofrecemos un servicio integral 360: consultoría y desarrollo del concepto, ingeniería y fabricación de mobiliario estándar o a medida y equipamiento completo, servicio de dirección de proyecto, licitación y obra, instalación, montaje y servicios específicos en el punto de venta.

A.: ¿Qué tipo de soluciones demanda la distribución en mobiliario? ¿Cuáles son las últimas tendencias en la estética de las tiendas?

A.F.: Es importante en primer lugar distinguir entre el mobiliario destinado a la exposición de producto de gran consumo, para el que se demandan soluciones que contemplen seguridad en el punto de venta, ergonomía para los operarios, modularidad y versatilidad para la implantación. Nosotros además estamos trabajando en lo que denominamos estantería inteligente, capaz de integrar diferentes tecnologías que permitan por una lado conectar con el comprador y por otro dar información al retailer del tipo: sobrecarga de peso en un estante, interpretación errónea de un planograma o próxima ruptura de stock en un producto.

En segundo lugar está el mobiliario desarrollado a medida para personalizar el 'look & feel' de los diferentes universos de las tiendas. Esta es quizás la tendencia más destacada a nivel de estética: espacios en los que el lenguaje visual creado a partir de la decoración, iluminación, mobiliario, tecnología y comunicación visual, ofrecen una experiencia de compra diferencial.

A.: ¿Han incorporado novedades a su porfolio de productos en el último año?

A.F.: Estamos desarrollando soluciones tecnológicas para el punto de venta que categorizamos según su aportación de valor en tres grandes familias: experiencia de compra, procesos en tienda y métrica y analítica. También seguimos ampliando nuestras soluciones para la zona de cobro en la que cabe destacar especialmente el nuevo modelo de caja ‘Escher’. Otras líneas en las que hemos estado y seguimos trabajando actualmente son aquellas dirigidas a mejorar tanto la accesibilidad de los puntos de venta, favoreciendo un diseño universal de los espacios o creando productos específicos como el elevador de cestas, así como la investigación para el diseño y producción de soluciones más sostenibles para el punto de venta.

Todas estas innovaciones las mostramos en nuestro Brand Lab inaugurado a principios de año como continuación del showroom de alimentación que tuvimos en 2016.

A.: ¿Han desarrollado proyectos que repondan a la demanda de referencias bio?

A.F.: Sí, hemos desarrollado tanto proyectos nacionales como internacionales, con cadenas como Tesco, Carrefour o Auchan. Además, nuestro maobiliario se ha incluído en las primeras tiendas ‘Spar Natural’ puestas en marcha en Canarias.

A.: Además de la salud, otra de las preocupaciones de consumidores y empresas es la sostenibilidad. ¿Responden sus soluciones a este criterio?

A.F.: Contamos con varias certificaciones, como la ISO 14001, que lo avalan. También llevamos varios años certificados en FSC y en PEFC, por lo que se identifica que un producto o un proyecto ha tenido una producción sostenible. Hemos realizado proyectos certificados para varias compañías, entre ellas Aldeasa.

A.: ¿Cómo va a cambiar el uso de smartphones y de códigos QR el mobiliario de los supermercados y centros de distribución?

A.F.: Las redes sociales, el comercio electrónico y las nuevas tecnologías han provocado la irrupción de un nuevo perfil de consumidor: el cliente interconectado. Este hecho ha forzado un cambio de paradigma en la relación marca-comprador en el sector retail, forzando la aparición del concepto de omnicanalidad: conectar con el cliente sin que importe el medio, creando un vínculo personalizado a partir de una experiencia memorable integrada.

En este contexto los retailers y las marcas con presencia en retail están en pleno proceso de transformación digital de sus instalaciones. La tienda de la era digital hace que el espacio sea público (show-rooming vs. web-rooming) y que esté centrado en el cliente, generando innovación. El área de venta pasa de vender un producto a convertirse en una herramienta de servicio, generando experiencia. La innovación, la experiencia y el compromiso convierten al consumidor en un comprador activo.

A.: ¿Qué innovaciones se han introducido en el sector en los últimos años y cuáles prevén que se producirán a medio plazo?

A.F.: Los últimos años han venido marcados por la tematización de los diferentes universos de las tiendas. Hoy, independientemente del formato híper, súper, proximidad, especialidad o conveniencia, podemos encontrar bodegas que podrían ser museos del vino, panaderías que nos recuerdan a obradores artesanales, zonas de frescos que nos trasladan al mercado de toda la vida o espacios bio desarrollados con materiales que bien podrían estar en una boutique de moda.

Los puntos de venta son ahora también puntos de encuentro. Facilitar espacios experienciales capaces de conectar con el consumidor, observarle y generar aprendizaje sobre su comportamiento son los retos más importantes para el sector en los próximos años.