La compañía de envases, embalajes y piezas técnicas Knauf Industries se ha unido al proyecto ‘Envases Plásticos y Economía Circular’, que busca reforzar las estrategias empresariales para avanzar hacia la economía circular y el horizonte H2030. La iniciativa, impulsada por el centro tecnológico Ainia, se basa en un estudio estratégico que, durante los próximos meses, analizará la reciclabilidad de los envases plásticos y las últimas tendencias en biomateriales como plásticos biodegradables, compostables y biobasados.
De entre los aspectos que analizará el estudio, destacan las barreras y soluciones tecnológicas actuales para el reciclado, las potenciales aplicaciones de los biomateriales, la seguridad de estos envases en contacto con alimentos y la gestión de residuos. Todo ello con la vista puesta en el Horizonte 2030 fijado por la Unión Europea para que, antes de ese año, todos los envases de plástico sean reciclables o reutilizables y que, por lo tanto, disminuya el uso de plásticos de usar y tirar.
Knauf participa en el proyecto junto a una veintena de compañías dentro de su
compromiso con el uso responsable y ecosostenible de los envases plásticos
tanto a nivel de fabricación como de consumo y reciclado.
“La innovación debe ser la punta de lanza del sector packaging para abordar los
retos que tenemos por delante; por eso queremos ser partícipes de proyectos
como el que ha impulsado Ainia”, afirma Víctor Borrás, responsable de
marketing de Knauf Industries. “En Knauf dedicamos buena parte de nuestros
esfuerzos en perfeccionar no solo el reciclado de los envases, sino también su
proceso de producción, a fin de diseñar las aplicaciones que respondan a las
necesidades del mercado de una forma circular, eficiente y ecosostenible”.
El EPS, también conocido como 'Airpop', es totalmente reciclable a través de
distintos procesos que permiten la reutilización del material para construcción,
aislamientos térmicos, mobiliario urbano, abono, mejora de suelos, relleno para
peluches y cojines, bolígrafos, nuevos envases EPS y la generación de energía
mediante combustión, entre otros.
La posibilidad de reciclar mecánicamente este plástico permite ahorrar costes
al incorporar el reciclado en el proceso productivo mediante el triturado de las
mermas y del producto limpio. Además, gracias a su capacidad de expansión, el
EPS está compuesto en un 98% por aire y solo en un 2% por plástico.