La Asociación Nacional de EPS (Anape) ha querido aclarar la situación de las cajas de EPS con respecto a la actual legislación europea. A mediados de 2019 fue publicada la Directiva 2019/904 relativa a la reducción del impacto de determinados productos de plástico en medio ambiente. Esta directiva, que se transpondrá en España a partir de Julio de 2021, tomará medidas sobre algunos productos de gran consumo y artes de pesca, que son los que más se encuentran en el medio marino, sin que ninguno de los artículos de la misma haga referencia alguna a la caja de pescado de EPS. Como destaca la asociación, actualmente las cajas son un producto que se manipula cerca de la costa y es muy importante que todos los agentes que intervienen en la cadena colaboren en su correcta gestión para evitar filtraciones no deseadas. El fabricante, el armador, las cofradías de pescadores, las lonjas, los distintos gestores y autoridades de puertos forman parte de una cadena de valor "que no debe fallar". Algunas iniciativas en las que Anape participa para aumentar el reciclado en España son los Centros Eco-EPS o Life EPS-Sure.
Consciente de la preocupación medioambiental de la sociedad, el sector del EPS o airpop participa en distintos proyectos que impulsan la mejora de la recogida de residuos en puntos de generación para aumentar el reciclado de este producto. Se ha sumado además a otras iniciativas para la mejora de los impactos en la propia industria como el proyecto Operation Clean Sweep, que elimina las posibles pérdidas de granza.
En el caso de la caja de pescado de EPS-airpop,Anape recuerda que el producto cumple con las garantías sanitarias actuales (reglamento 10/2011) y que el EPS es el único material realmente considerado como aislante térmico para el transporte de pescado, lo que garantiza calidad óptima del producto en destino y reducción del desperdicio alimentario, evitando así la necesidad de reposición. Por último, la caja de EPS ofrece resistencia mecánica a la humedad y tiene capacidad de apilamiento, lo que minimiza su impacto ambiental y genera ahorro económico. En España se reciclan alrededor de 7.500 t de EPS-airpop al año, elevándose la cifra en toda Europa hasta las 390.000 t.
