El fabricante de envases Storopack ha empezado a trabajar con los primeros resultados de ‘ChemCycling’, un proyecto colaboración con el grupo Basf para lograr un material reciclado químicamente enfocado al objetivo de conseguir que el 50% de los plásticos fabricados sean reciclables o reutilizables en 2030. Storopack y Basf llevan trabajando juntos en este proyecto desde 2018. La empresa de embalaje ha empezado a usar en España prototipos que han sido resultado de dicha investigación. En este caso, la empresa alemana utilizó ‘Styropor P Cycled’, una variante de EPS para fabricar el embalaje que protege productos farmacéuticos o comida (en ambos casos, muy sensibles a los cambios de temperatura), así como aparatos electrónicos.
Procesando aceite de pirólisis derivado de residuos plásticos, se consiguen reciclar materiales que hasta ahora no se podían recuperar. Se espera que BASF sitúe en un 17% el volumen de materiales obtenidos mediante reciclaje químico frente al 1% actual, lo que equivale a reciclar 74 Mt de residuos. En el año 2018, Storopack, especializado en embalaje de protección de EPS y EPP, generó un volumen de ventas de 473 M€.