La multinacional almeriense Cosentino ha desarrollado una innovación en el sector de superficies de cuarzo con la tecnología 'Silestone® N-Boost', que modifica la superficie del material a nivel molecular mejorando sus prestaciones técnicas y estéticas y haciendo que el mantenimiento de Silestone sea más sencilla, logrando una mayor intensidad de los colores. Cosentino califica a Silestone® N-Boost como "una nueva era para las superficies de cuarzo". De hecho, el desarrollo de N-Boost es denominado la revolución 4.0 de Silestone, tras los tres hitos anteriores: su lanzamiento en 1990, el desarrollo de la protección bacteriostática del material en 2005 y la creación del acabado mate Silestone Suede en 2012.

La limpieza y el mantenimiento de Silestone es más fácil ya que N-Boost otorga una propiedad hidrofugante a la tabla capaz de generar una extraordinaria resistencia al manchado. Esto es posible fundamentalmente debido a que el tratamiento N-Boost, al modificar las propiedades moleculares de la superficie de cuarzo, origina un cambio en la tensión superficial del material eliminando la micro-porosidad que se genera en el proceso de pulido y evitando la penetración de cualquier líquido. Este tratamiento basado en la nanotecnología logra asimismo una mayor intensidad del color e incrementa considerablemente el nivel de brillo, ya que N-Boost permite reflejar mucho mejor la luz sobre la superficie Silestone.

'Silestone® N-Boost' se lanza inicialmente al mercado con la colección Eternal de Silestone , así como con los dos nuevos colores icónicos de la marca, Iconic White e Iconic Black. De forma progresiva a lo largo de este año, este tratamiento se irá incorporando a todos los colores de la marca, teniendo siempre en cuenta la demanda del consumidor y el mercado. Asimismo, la nueva tecnología se aplicará a todos los espesores de los colores seleccionados.