El Centro Tecnológico Andaluz de la Piedra (CTAP), con sede en Macael (Almería), ha sido declarado en concurso de acreedores por el Juzgado de lo Mercantil número 1 de la capital almeriense, según el auto fechado el 20 de febrero y publicado el 4 de marzo. El centro, gestionado por un patronato con 54 patronos, entre los que se encuentran la Junta de Andalucía, empresas del sector, entidades financieras, asociaciones profesionales, universidades, escuelas técnicas y la Diputación de Almería, arrastra graves problemas financieros desde el pasado verano, cuando incluso se vio obligado a cerrar sus puertas y entró en preconcurso , según ha publicado la prensa local. Pero logró superar la situación y, a finales de 2016, la Junta ingresó 1,8 M€ en concepto de proyectos de investigación realizados y por financiación basal, una inyección de capital que no ha sido suficiente para evitar la entrada en concurso de acreedores apenas tres meses después.
Ya el pasado julio, la dirección del centro reclamaba a la administración autonómica el pago de una deuda de 3,6 M, aunque ésta fue desestimada por la Consejería de Economía, que la rebajó a 600.000 €. No obstante, al pago de esta cantidad se añadió después una subvención de 1,2 M correspondiente al año 2012 que hasta entonces contaba con una resolución provisional. Desde la Junta se ha señalado en varias ocasiones, incluso en sede parlamentaria por parte del consejero de Economía y Competitividad de la Junta de Andalucía, Antonio Ramírez de Arellano, que el CTAP debía "buscar también fondos privados" para su mantenimiento, ya que el "problema" que sufre se debe a que en los últimos años y, como consecuencia de la crisis de la construcción, los ingresos CTAP se habían rebajado en 400.000 € anuales.
