La Sala de lo Social de la Audiencia Nacional ha considerado "irregular" la readmisión de los empleados de Coca-Cola Iberian Partners en centros de trabajo que suponen un cambio de residencia, por lo que les exime de trabajar hasta que el Tribunal Supremo resuelva definitivamente en casación. Mientras, el embotellador único de Coca-Cola en España, Coca-Cola Iberian Partners, tendrá que pagar los salarios de sustanciación.
La decisión afecta a 308 trabajadores, en su mayoría de la fábrica de Fuenlabrada: los 278 empleados que no se han incorporado al puesto de trabajo que les asignó la compañía en otra ciudad; los 20 que sí se incorporaron a trabajar, pero en fábricas alejadas de su lugar de residencia; y otros 10 empleados, cuyos contratos son fijos discontinuos y están pendientes del vencimiento de la fecha para su incorporación, también en lugares diferentes de donde estaban sus puestos.
En un comunicado emitido por la compañía, esta acata lo resuelto por la Audiencia Nacional y señala que el auto "resuelve provisionalmente las demandas de los 278 trabajadores que rechazaron todas las ofertas de empleo planteadas por la compañía durante el proceso". Detalla además que "estas ofertas incluyen no sólo mantener el mismo puesto de trabajo en las plantas operativas sino que, en aquellos casos en que sea imprescindible el traslado, se entrega un paquete de compensación de hasta 25.000 € lineales y 500 € al mes para ayuda a la vivienda durante dos años" .
Coca-Cola Iberian Partners ha recordado que hasta la fecha son ya 893 trabajadores los que han aceptado una de las propuestas realizadas por la empresa incluyendo la recolocación en los centros que siguen operativos. Y ha querido destacar que la Audiencia Nacional "en ningún caso se pronuncia sobre la reapertura de los centros cerrados y, ante la imposibilidad acreditada por la propia empresa de que la readmisión se lleve a cabo en dichas plantas, supedita la decisión final a lo que resuelva el Tribunal Supremo".