Josep Font Fabregó, propietario del grupo de distribución Bon Preu a partes iguales con su hermano Joan Font, ha dado un paso más para salvar la unidad del negocio familiar, pendiente de un hilo a raíz del conflicto que mantienen ambos hermanos y que ha llevado a la compañía a dirimir su futuro en los tribunales. El último movimiento interno de Josep Font para ganar la batalla a su hermano ha sido dimitir y nombrar a su hijo Abel Font Dorca como administrador solidario. Según ha podido confirmar Alimarket, el pasado sábado, Josep Font remitió un comunicado a los gerentes de cada una de las tiendas de la compañía informando sobre el cambio de figura dentro de la administración del grupo.
El conflicto de Bon Preu se remonta a años atrás por desaveniencias entre los dos copropietarias con respecto a la política de dividendos de la compañía, una disputa que ha llevado a la misma a resolver la situación en los tribunales sin una sentencia todavía en firme. Con la delegación del cargo ejecutivo en su hijo, Josep Font pretende asegurar el futuro del grupo catalán, que en 2017 facturó 1.199 M y es uno de los inversores más activos dentro del sector de la distribución, con un desembolso de 147 M en 2017 y otro montante previsto que ascenderá a 200 M entre el pasado ejercicio y 2019, para la apertura de 27 establecimientos, una nueva sede en Osona y mejoras en otros centros, según el plan inicialmente previsto. Solo en 2018, inauguró una decena de tiendas, entre ellas, seis hipermercados, siendo una de las compañías más dinámicas en cuanto a la creación de superficie de venta en territorio catalán.