Mahou San Miguel ha lanzado su Programa de Agricultura Sostenible, un novedoso proyecto dirigido a fomentar el cultivo más responsable y eficiente de las materias primas que se utilizan para elaborar cerveza y, a través de cual, impulsará la evolución de los modelos productivos actuales. Todo ello, bajo el Marco Estratégico de Sostenibilidad “Somos 2020” de desarrollar productos, servicios y experiencias más sostenibles y diferenciales, poniendo el foco en toda la cadena de valor.
La cervecera pretende estrechar lazos con los agricultores locales trabajando conjuntamente en un plan que aborda el cultivo sostenible tanto desde la dimensión ambiental como económica y social. Así, se centrará en cuestiones como la lucha contra el cambio climático, la preservación de la calidad de los cultivos, la optimización del uso del agua o el fortalecimiento de las estructuras sociales, entre otros.
Como piedra angular del programa, Mahou San Miguel está inmersa en el desarrollo del Decálogo de Agricultura Sostenible para definir las pautas iniciales que permiten implantar un sistema de producción agrícola más eficiente y sostenible. La organización World Wildlife Fund (WWF), la mayor ONG internacional independiente dedicada a la defensa de la naturaleza y el medio ambiente, colabora con la cervecera en la elaboración de este documento.
“Hacer un uso responsable de los recursos naturales es primordial para nosotros. Por ello, decidimos dar un paso más allá en este sentido para trabajar conjuntamente con nuestros proveedores de materias primas en la mejora de la sostenibilidad de los cultivos", asegura Ana Andújar, Directora de Compras de Mahou San Miguel.
En esta misma línea, Mahou San Miguel logró cerrar 2018 como una de las empresas más eficientes de Europa a nivel ambiental. Concretamente, los indicadores ambientales que presentó el pasado año la han situado dentro del 25% de las compañías de Alimentación y Bebidas con mejor desempeño en este ámbito según el BREF Europeo, el documento de referencia que recoge las mejores técnicas disponibles en la materia para los distintos sectores industriales.
En 2018, la compañía consiguió ahorrar 173.782 m3 de agua, lo que supuso una reducción del 3,2% en su consumo respecto al año anterior. Además, gracias a la implantación de distintas medidas, entre las que destaca que el 100% de la energía eléctrica que utilizan sus centros de producción y sedes procede de fuentes renovables, disminuyó en más de un 1% su consumo unitario de energía. Por su parte, sus emisiones de CO2 a la atmósfera descendieron respecto al año anterior, evitando la emisión de 2.634 tm.
La compañía cuenta con residuo cero en todos sus centros de producción en España y, en 2018, consiguió reducir en 115 tm el uso de materias primas, optimizando así el Análisis de Ciclo de Vida de sus productos. Para lograr estos indicadores, la cervecera ha invertido más de 15,5 M€ en los últimos cinco años en su sistema de gestión ambiental.