El sector de la patata prefrita está recorriendo estos 15 meses que dura ya la crisis del Covid bajo un estado de permanente incertidumbre, atendiendo a los distintos ritmos regionales en las restricciones en el canal foodservice, especialmente afectado en las zonas turísticas. No en vano, McCain declara una cuota de facturación en el canal del 94%, igual que Eurofrits, por un 93% de Farm Frites o un 70% de Lutosa. Aún así, los operadores consultados nos trasladan una lectura positiva sobre el comportamiento de la categoría, teniendo en cuenta que los datos de consumo fuera del hogar indicaban una caída del 42% a finales de 2020, según los datos de la consultora NPD, y que las estimaciones indican que el 30% de los establecimientos de hostelería no volverán a abrir. Ya en 2021, y especialmente durante los últimos meses, la tendencia en foodservice empieza a revertir las malas sensaciones de 2020, presentando durante marzo y abril sus mejores registros de ventas desde el pasado verano.
Por otro lado, en línea con el global de la industria del congelado, la demanda de patata prefrita congelada en la distribución organizada viene experimentando un comportamiento más que notable, con un incremento de sus ventas en volumen del 6,2%, y del 7% en su valor de mercado, para el TAM cerrado a finales de febrero de 2021. Esta demanda continúa liderada de forma aplastante por las marcas de distribución, que generan casi el 92% de la demanda, creciendo a ritmo del 7,4% y del 8,5% en volumen y valor, respectivamente. Y sin embargo, en esta medición, destaca principalmente el comportamiento de la primera marca sectorial, ‘Mccain’, que se apunta crecimientos del 20,7% y del 23% en volumen y valor.
En este contexto, el líder del mercado nacional, Mccain, nos ofrece algunas pistas sobre la que está siendo su estrategia para transitar por la crisis del canal foodservice. La compañía destaca en primer lugar el apoyo prestado por su fuerza de ventas a sus distribuidores y clientes, y explica que durante estos meses se ha puesto el foco en aquellos segmentos que sobrevivían mejor a la crisis, principalmente el segmento de la restauración rápida, y ya durante los últimos meses el conjunto de la restauración organizada. En la misma línea, se ha apoyado el delivery y take away, con resultados positivos para los productos asociados, como la gama ‘Sure Crips’. Por último, se destaca la importancia de no perder el foco en la innovación, manteniendo el ritmo de novedades, que en su caso están protagonizadas por lanzamientos como ‘Crunchy Petals’.
Por otro lado, desde el sector también se alerta sobre la tendencia inflacionista en la mayoría de precios de las materias primas, lo que podría condicionar la recuperación del segmento de cara a los próximos meses.