La pandemia provocó una disminución de los hurtos en los supermercados, pero con el fin de las restricciones imperantes por el Covid-19, ya en 2021, se observó un cambio de tendencia y los tradicionales delincuentes retomaron los hurtos con una mayor potencia. Según los datos aportados por Checkpoint Systems, el hurto en España creció el pasado año un 0,7%, una tendencia que retorna esta actividad delictiva a niveles prepandemia. Todo apunta, además, a que esta evolución continuará al alza impulsada por un contexto de incertidumbre económica, principalmente marcado por el encarecimiento de los precios y la escasez de las materias primas.
La industria de alimentación y bebidas sigue siendo uno de los principales sectores donde más hurtos se registran. Según una encuesta realizada por Checkpoint Stystems, el hurto externo representa de media el 0,5% sobre las ventas totales de los principales retailers en España. Los productos más susceptibles de hurto en alimentación siguen siendo los vinos y licores, los quesos, los embutidos y los cárnicos frescos. Se mantienen también estáticas las categorías de producto más robadas en secciones como salud y belleza (maquillaje, cuchilla de afeitar, fragancias ya colonias o desodorantes).
Como resultado la demanda de soluciones antihurto ha vuelto a crecer. En opinión de Emanuele Soncin, Business Unit Director de Checkpoint Systems España “el sector antihurto en España ha perdido el apetito a nivel de desarrollo”. Contrariamente, la multinacional canadiense, líder en el mercado de soluciones antihurto en España para la distribución alimentaria, sigue apostando por la innovación y está testando una nueva solución RFID para el control de los productos frescos en toda la cadena de suministro. En concreto, la nueva solución RFreshID podría verse implantada muy pronto en algunas de las principales cadenas de supermercados del país. Se trata de la implementación de una etiqueta en la bandeja de los productos frescos envasados en su punto de origen, que permite controlar la mercancía desde su fase de producción hasta su llegada al cliente final. De esta manera, se automatiza la gestión del stock, al tiempo que permite tener información en tiempo real del inventario. Con ello, se consigue una mayor precisión del inventario (de hasta el 100%), se puede llegar a reducir hasta un 78% la mano de obra y, además, se puede disminuir hasta en un 60% el desperdicio alimentario, al tener un mayor control sobre la fecha de caducidad de los productos.
Entre las últimas novedades de Checkpoiny Systems también se encuentran las nuevas antenas NEO NS40, que destacan por ampliar el ancho de paso de entrada a la tienda hasta los 2,70 m, lo que permite instalarlas en puertas más anchas. Este nuevo modelo también sobresale por su diseño más discreto y su conectividad inalámbrica, además de ofrecer una protección electrónica de artículos basada en un tecnología circular de 360º para una detección multidireccional. En palabras de Soncin, "este modelo de antena ha superado solo en dos años las ventas de la anterior tecnología". En este sentido, tanto el RFresID como los nuevos anchos de paso constituyen un nuevo estándar tecnológico para el sector de supermercados en soluciones antihurto y de pérdida desconocida.
Además, para finales de este año la compañía prevé lanzar al mercado antenas en caja totalmente invisibles, porque según Soncin “la seguridad no tiene por qué ser fea”. En este sentido, Checkpoint continúa trabajando para integrar soluciones antihurto en el punto de venta que pasen desapercibidas para una mejor experiencia del consumidor.
Checkpoint Systems obtuvo unas ventas de 21 M€ en 2021, apuntando un crecimiento del 12,8%, con respecto a la facturación del ejercicio anterior. Este año la compañía también estrena un nuevo HUB en Barcelona, el más grande Europa, que se une a sus centrales de América y Asia.