El grupo constructor y promotor ACR se ha sumado a la iniciativa "Un Millón por el Clima", impulsada por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) y Ecodes, que promueve la puesta en marcha de acciones de ciudadanos, empresas e instituciones para luchar contra el cambio climático. El resultado de la iniciativa se presenta en la Cumbre por el Clima de la ONU “COP21” , que se celebra en París entre el 30 de noviembre y el 11 de diciembre de 2015. El compromiso de ACR Grupo se aplica tanto en los proyectos que ejecuta como en su actividad diaria como empresa. En el primer caso, la propuesta refuerza la apuesta por la instalación de iluminación LED y dispositivos ahorradores de agua, así como la colocación de sistemas de aislamiento o la mejora del diseño de la envolvente de los edificios. En segundo lugar, ACR Grupo opta por promover e implantar entre sus empleados sistemas de videoconferencia y realizar reuniones online, fomentar los desplazamientos en tren frente al avión, optimizar el uso del papel, separar y reciclar los residuos o reutilizar productos y materiales reciclados.
ACR Grupo controla, durante la ejecución de sus obras, parámetros como la estanqueidad al aire o el nivel de aislamiento térmico mediante el uso de las últimas tecnologías manejadas por técnicos certificados por el ITC (infrared training center), que miden y regulan lo ejecutado para que el resultado final sea lo más eficiente posible. La compañía también audita proyectos construidos para terceros para reducir el consumo de calefacción y climatización, utilizando herramientas de cálculo reconocidas, como Energy+ y Desing Builder. Un ejemplo del uso de las últimas medidas en materia de eficiencia energética es el proyecto de regeneración urbana del barrio de Mogel, en Eíbar (Gipuzkoa) en el que entre otras actuaciones, la rehabilitación de las fachadas ha logrado una reducción de las infiltraciones del aire de un 30%, con el consiguiente ahorro energético. Además, el grupo participa en la iniciativa “Wool4Build” -puesta en marcha a finales del año pasado por la Comisión Europea y que se prolongará hasta el año 2017-, que pretende desarrollar un aislante térmico y acústico para edificios a partir de materias primas procedentes de la industria peletera