El grupo Aktua , especializado en la gestión de activos inmobiliarios y financieros, se ha hecho con el 100% de la firma Gestión de Inmuebles Salduvia , propiedad de Ibercaja Banco , y dedicada a la gestión de los activos inmobiliarios de dicha entidad. La operación, realizada a través de Global Acamar, filial de Aktua, le permitirá administrar, gestionar y comercializar los activos inmobiliarios de Ibercaja durante un plazo de 10 años, mientras que la entidad financiera logra una "alianza estable con un socio industrial de primer nivel" con el objetivo de "impulsar la venta de activos inmobiliarios por el canal minorista y simplificar y optimizar su estructura en el ámbito de negocio inmobiliario". La compra incluye la gestión de los activos presentes y futuros del balance de Ibercaja y de sus filiales inmobiliarias, así como otros activos inmobiliarios que cuentan con financiación de la entidad. En total, cerca de 14.000 activos inmobiliarios valorados en unos 2.500 M€, aunque Ibercaja, como señala en un comunicado, mantendrá la propiedad de los mismos.
Aktua , controlada desde el año 2012 por el fondo estadounidense Centerbridge Partners, que se la compró a Banesto, pasará a gestionar, tras esta operación, una cartera formada por más de 42.000 activos inmobiliarios . Aktua dispone de 24 oficinas en España y cerca de 400 empleados. Entre los activos que gestiona Aktua figuran también los de BMN y los del banco griego Alpha Bank. La cabecera de Aktua, Aktua Soluciones Financieras, facturó 53,59 M€ en 2014 con 302 empleados y un resultado neto de 12,51 M€.
Salduvia , hasta la primavera de 2015 denominada Ibercaja Servicios Inmobiliarios, facturó 3,35 M€ en 2014, con una plantilla formada por 16 trabajadores. El pasado año Ibercaja vendió 4.436 inmuebles, un 24,5% más que en 2014. Hay que recordar que otras entidades como Santander, CaixaBank, Bankia y Popular también vendieron hace un par de años sus plataformas inmobiliarias mediante acuerdos similares que contemplan la gestión y comercialización de sus activos vinculados al ladrillo durante un periodo de 10 años.