Rekker presenta su nueva colección de muebles de cocina 'Bakea', que destaca por sus aires coloniales, con texturas y colores naturales. Los muebles del modelo 'Bakea' están realizados en madera de roble lacada a poro abierto. Gracias a esta técnica, la madera conserva su veta natural otorgándole un toque rústico que se percibe tanto de forma visual como con el tacto. Los tiradores están integrados en las propias molduras y la encimera está elaborada en porcelánico con acabado marmóreo.
Asimismo, el interior de los armarios, cajones y gavetas pueden personalizarse con una gran variedad de accesorios. Un ejemplo es la práctica bandeja con rejilla elaborada en madera que es ideal para cortar pan de manera cómoda y limpia gracias a su compartimento para recoger las migas. El mueble despensero está realizado íntegramente en madera de roble y dispone en la parte inferior de dos gaveteros cuyo tirador encastrado está acabado en cobre. Además, la cocina incorpora una vitrina modelo IKS, fabricada con perfilería en negro satinado, bisagras 'Hidden' insertadas en la estructura del mueble y la puerta, de forma que quedan totalmente ocultas. Están disponibles en versión con freno y con push. Por último, la vitrina dispone también de iluminación superior con 'flexiled', que aporta un punto de luz indirecta. El ambiente se completa con una isla central que amplía la zona de almacenaje de la cocina.
Finalmente y como elemento contiguo a la cocina, se incorpora un planchador y lavadero, cuyas puertas plegables y retráctiles lo dejan oculto cuando no se está trabajando en él. Es un espacio amplio y funcional para el cuidado diario de la ropa con sitio para lavar, planchar, guardar la colada y con armarios para colocar útiles de limpieza. También cuenta con cuidados detalles como la base en 'Corian' que no tiene juntas y es muy higiénica y un desagüe para evitar humedades que provengan de prendas que se cuelguen aún mojadas.