Ferrovial ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el cumplimiento del plazo este miércoles 24 de mayo para formalizar el derecho de separación, sin que ningún de los accionistas críticos con el traslado de la sede del grupo a Países Bajos lo haya ejercido. Así, tal como se esperaba, ningún accionista ha decidido vender sus acciones a un precio notablemente inferior al de cotización, lo que hubiese supuesto una pérdida para todos ellos, y tampoco ningún acreedor ha ejercido su oposición.
Para poder sacar adelante este traslado, que tuvo un apoyo del 93,3% durante la junta de accionista celebrada el pasado 13 de abril, Ferrovial determinó que los derechos de separación que quisieran ejercitar los accionistas críticos a este traslado no debían superar los 500 M€. En este sentido, Leopoldo del Pino, hermano del presidente de Ferrovial y cuarto accionista del grupo con un 4,15%, votó en la junta en contra de este traslado social, pero no se contemplaba la posibilidad de que ejercitara su derecho de separación.
Con todo ello, el grupo sigue adelante con sus planes, que pasan por empezar a cotizar en la bolsa de Ámsterdam como paso previo a hacerlo en Nueva York, su principal objetivo con Norteamérica como su foco prioritario de su negocio, logro que espera conseguir en la segunda mitad del año. El grupo Ferrovial consolidó una facturación de 7.551 M€ en 2022, un 9,3% más, y obtuvo un beneficio neto de 186 M€. De esta cifra 6.463 M€ correspondieron a su negocio de construcción, que cerró 2022 con una cartera de contratos valorada en 14.743 M€.