Decocer, firma especializada en cerámica de pequeño formato, ha presentado su nueva colección Ábaco, que reinterpreta el tradicional formato 10x10 cm desde una mirada contemporánea: precisa, serena y profundamente expresiva. "Como su nombre sugiere, la colección toma inspiración en el orden y la armonía de esta herramienta ancestral de cálculo, convirtiendo cada pieza en un módulo capaz de generar ritmos, patrones y atmósferas infinita", señalan desde la compañía.
Realizada en gres porcelánico mate, Ábaco permite construir superficies sobrias, táctiles y funcionales. Su paleta suave y equilibrada —de blancos, arenas y tierras a grises, verdes y negros— hace posible composiciones limpias y atemporales, con una lectura gráfica muy clara. El color uniforme de cada pieza favorece tramas precisas y patrones estables, ofreciendo fondos serenos que se refuerzan a través del ritmo del despiece y la modulación.
El formato 10x10 facilita trabajar con patrones precisos, tramas y composiciones claras. Su escala humana y su modulación intuitiva permiten controlar la lectura del plano, reforzar direcciones o crear transiciones suaves entre zonas.
Ábaco se integra con naturalidad en proyectos residenciales, comerciales y de hospitality, manteniendo un equilibrio entre sobriedad estética y funcionalidad. Las composiciones posibles se multiplican, permitiendo pasar del minimalismo más calmado a configuraciones llenas de ritmo y carácter.
La paleta completa incluye: Blanc, Sand, Linen, Cotto, Pewter, Flora, Austral y Nero. Cada tono ha sido desarrollado para dialogar con los demás, ampliando las posibilidades cromáticas y reforzando la coherencia de proyecto. Desde combinaciones suaves que aportan serenidad hasta contrastes potentes que marcan un gesto arquitectónico claro.
Una de las claves expresivas de Ábaco es el papel de la junta en la lectura del plano. Según el color elegido, la superficie puede percibirse como un lienzo monolítico y calmado —cuando la junta se aproxima al tono de la pieza— o como una retícula marcada y muy gráfica si se apuesta por el contraste. Esta versatilidad permite ajustar la intensidad del diseño sin modificar la composición, adaptándola a atmósferas más serenas o más expresivas. La junta se convierte así en una herramienta creativa que amplifica el potencial de la colección desde una perspectiva arquitectónica más profunda.
Escoger un color de junta distinto al azulejo permite redibujar la cuadrícula, enfatizando el ritmo modular y reforzando la sensación de orden geométrico. Por el contrario, utilizar una junta cercana al tono de la pieza genera superficies más continuas y silenciosas, adecuadas para proyectos que buscan calma, neutralidad o una percepción más amplia del espacio.
Ábaco combina una estética depurada con un rendimiento sólido, adecuado para espacios que requieren materiales fiables y versátiles. Su naturaleza porcelánica le permite funcionar bien tanto en paredes como en suelos, en interiores o exteriores, manteniendo una lectura continua y coherente en todo el proyecto.
"Ábaco no busca imponerse: ordena, acompaña, acentúa. Es una colección que se integra en arquitecturas contemporáneas sin estridencias, con una presencia rotunda y silenciosa. Un recurso que facilita proyectar desde la lógica, la estética y la sensación", finalizan desde Decocer.