El pasado mes de agosto, el especialista en maquinaria para plástico Starlinger recibio dos cartas de no objeción (LNO en sus siglas en inglés) desde la FDA, la autoridad norteamericana para alimentación y productos farmacéuticos, para su nuevo equipo de procesado de escamas de PEAD posconsumo. Dichas cartas se refieren a los procesos de reciclado “bottle-to-bottle” y “crap-to-crap” de este sistema y confirman que el regranulado obtenido en este proceso puede emplearse en volúmenes de hasta el 100% para el contacto alimentario. La compañía ya recibido de la FDA una carta semejante para su sistema de reciclado de PEAD.
La nueva línea de Starlinger está compuesta por una líneadinámica de reciclado ‘recoStar’ con un módulo de desgasificado ‘C-Vac’ y una tecnología de reducción deolores, aspecto este último que resulta esencial para la obtención del grado alimentario y que viene a sustituir otros métodos como el uso de aditivos.
“Los envases de PEAD se utilizan para muchos alimentos distintos. Si, por ejemplo, las sustancias de los restos de comida migran al plástico, pueden provocar olores desagradables en el proceso de reciclaje. Para evitar esto, utilizamos nuestro procedimiento de tres pasos: comienza con la preparación del material, seguido de una desgasificación altamente eficiente en el módulo C-VAC, y finaliza con el postratamiento térmico del regranulado producido. Este método garantiza que se eliminen incluso los olores profundamente incrustados ”, explica Paul Niedl, director comercial de Starlinger Recycling Technology.