La crisis del coronavirus está poniendo a prueba a las cadenas hoteleras, una vez anunciado su cierre obligado, es decir, el parón completo de su actividad teniendo que mantener sus gastos. En el marco de esta situación crítica, aunque previsiblemente temporal, la compañía estadounidense Best Western Hotel Group, siendo "la salud y la seguridad de sus clientes, asociados, familias y comunidades la mayor prioridad", ha implementado "una serie de medidas para garantizar tanto el bienestar de los huéspedes como ofrecer apoyo financiero a sus hoteleros". En este sentido, el operador "ha activado una serie de medidas con el objetivo de respaldar a sus hoteles y propietarios ante la disminución continuada de las operaciones que se ha ido experimentando en la industria del turismo debido a los efectos negativos del covid-19. Estas acciones se traducen principalmente en la demora de los honorarios que debieran abonar durante los próximos tres meses".
Asimismo, Best Western también está adoptando "una política de cancelaciones comprensiva" dadas las circunstancias. También, hace unas semanas anunció que, a fin de paliar los efectos negativos en del coronavirus sobre la industria hotelera, mantendría la categoría élite a todos los miembros del programa Best Western Rewards (BWR), "una medida que sus socios podrán disfrutar hasta el día 31 de enero de 2022 sin necesidad de cumplir con los requisitos necesarios. Además, los integrantes de este programa podrán donar sus puntos, que nunca caducan, al fondo benéfico de BWHR, Best Western for a Better World®, comprometido a ayudar a las personas que hayan sufrido las consecuencias del virus en todo el mundo".
Por otra parte, el grupo ha aplicado diversos protocolos y medidas de prevención específicas destinadas a reforzar la limpieza de los establecimientos para garantizar la salud y el bienestar de sus huéspedes y empleados. Entre ellas, "el uso de técnicas mejoradas para limpiar las habitaciones después de cada estancia, prestando una mayor atención a los puntos de contacto (puertas, botones de ascensores, picaportes, cerraduras, interruptores de luz, etc.); una especial atención sanitaria en las zonas comunes; o una mayor presencia de dispensadores de gel desinfectante para las manos". Siguiendo los consejos de las autoridades de salud locales y la Organización Mundial de la Salud (OMS), Best Western ha habilitado un espacio informativo en su portal de miembros; se trata de "una fuente de referencia con consejos e información de actualidad para los clientes donde se les anima a seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias oficiales".
Best Western Hotel Group está presente en España a través de tres hoteles (con un total de 243 habitaciones), tras haber desafiliado recientemente el madrileño 'Best Western Los Condes' (3E-68). Los tres se integran mediante una fórmula parecida a la franquicia por la que el grupo incorpora y da cobertura a hoteleros independientes. Se trata del 'Best Western Premier Dante' (4E-80) y el 'Best Western Plus Hotel Alfa Aeropuerto' (4E-99), de Barcelona, así como el 'Best Western Mediterráneo' (4E-64), de Castelldefels (Barcelona). Además, está en desarrollo el proyecto del 'Best Western Premier Palacio de Sofraga' (5E-30), de Ávila, previsto inicialmente para el verano. Finalmente, a raíz de la compra internacional de Worldhotels, tiene cinco hoteles asociados a dicha red: el 'Villa Real' (5E-115), de Madrid, el 'Balmes Hotel & Residences' (4E-114), de Barcelona, y los bilbaínos 'Ercilla' (4E-300), 'López de Haro' (5E-53) y 'Embarcadero' (4E-27).