El pasado marzo, la fabricante de juguetes JESMAR, S.A. presentó un expediente de liquidación para el cierre de sus instalaciones, lo que supondrá el despido de sus 88 empleados fijos y varias decenas de eventuales. Según la dirección, esta decisión responde a que la empresa "no es viable", algo que podría haber sido provocado por la fuerte competencia de los fabricante chinos y por la dificultad de exportar su catálogo (la mitad de la producción de la compañía iba destinada a países fuera de nuestras fronteras) debido al alza del euro. Sin embargo, los sindicatos aseguran que la cartera de pedidos y, por consiguiente, el nivel de trabajo, incluso ha aumentado en los últimos años, por lo que atribuyen la liquidación a los problemas personales que existirían entre los cinco hermanos de la familia Juan Pérez que se reparten a partes iguales el capital de JESMAR. Según informaciones publicadas, dos de ellos habrían sido despedidos por los otros 3, lo que habría provocado enfrentamientos en los tribunales. Al cierre de esta edición, estaba prevista una reunión entre la dirección de la empresa y los trabajadores, en la que presumiblemente se ofrecerían más detalles sobre la liquidación.
DATOS ECONOMICOS DE JESMAR