El gobierno madrileño aprobó a finales de julio pasado acelerar las obras de la segunda fase de remodelación del Clínico San Carlos, para que se completen en 18 meses, en lugar de en los 48 previstos inicialmente. De esta forma, se procedería al cierre del ala norte de hospitalización del Clínico y a su traslado a otro centro de la región. A falta de firma definitiva, el gobierno madrileño estaría estudiando y negociando qué hospitales serían los adecuados para acoger a los pacientes y personal afectados por la medida. Fuentes sindicales apuntaban a que el centro elegido para el traslado sería el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla.
Como se recordará, la segunda fase de reforma del Clínico San Carlos fue autorizada en marzo de 2007, con una inversión de 65,52 M€, que suponía completar la renovación integral del centro iniciada hace ahora diez años. En aquel momento el plan diseñado implicaba la modernización de cerca de 79.000 m2, afectando a un total de 722 camas, de las que 586 eran de hospitalización convencional y 154 de unidades especiales como psiquiatría, críticos, neonatología y unidad de reanimación post-anestésica. La reforma afecta básicamente al ala norte de hospitalización, los bloques este (zona de quirófanos, cuidados intensivos y área de partos) y oeste, en el que también se incluían las áreas administrativas y jefaturas de servicio. Entre las obras autorizadas figuraba un nuevo vestíbulo de acceso desde la Universidad, reformas del edificio de cocina y cafetería, y en los pabellones C y D, donde se ubicaría el hospital de psquiatría.