Aigües de Vilajuïga, envasadora de agua mineral con gas de la comarca del Alto Ampurdán (Girona), ha cesado actividad recientemente como consecuencia de las pérdidas acumuladas y ante la imposibilidad de encontrar un comprador que tomase las riendas del negocio.
La compañía con planta en el municipio de Vilajuïga alcanzó en 2015 -último ejercicio con datos públicos- unas ventas netas ligeramente superiores a los 370.000 €, cifra similar a la del curso anterior, y pérdidas cercanas a los 9.000 €.
En la actualidad, el 80% de su capital está en manos de la constructora Copcisa Corporación, cuya sede central se encuentra en la localidad barcelonesa de Terrassa (perteneciente a la comarca de Vallès Occidental), mientras que el 20% restante pertenece a Carlos Cusí, miembro de una de las familias fundadoras de la empresa.
Los propietarios tienen intención de continuar con las negociaciones para vender tanto las instalaciones como la concesión del manantial, aunque para retomar la actividad será necesario llevar a cabo nuevas inversiones, principalmente en maquinaria. Hasta la fecha, trabajaban en la envasadora un total de siete empleados.
Aigües de Vilajuïga envasaba agua mineral con gas (con carbónico natural y añadido) en tres formatos (0,33 l, 0,5 l y 1 l, en envase de vidrio no retornable).