La cooperativa granadina La Palma apuesta por la agricultura moderna y comprometida con el medio ambiente, la salud y el consumidor, al que tratan de satisfacer, atendiendo a las demandas de conveniencia y calidad. Entre sus metas para este año destaca la posibilidad de ampliar y mejorar su gama de productos, encontrar el mejor sistema de producción sostenible e investigar nuevos formatos que sean atractivos y respetuosos con el medio ambiente.
En su reto hacia la producción sostenible, la cooperativa se ha marcado reducir la huella de carbono en los procesos de producción y comercialización, para lo que ha adoptado diferentes medidas dentro del Plan de Sostenibilidad 2030, que va desde la utilización de fuentes de energías renovables en todo el proceso de producción hasta la creación de soluciones de embalaje como envases biodegradables, films ecológicos o envases de cartón y de pasta de celulosa. “El mercado está cambiando sus hábitos y necesidades de alimentación. Pone por delante la calidad y la sostenibilidad”, comenta Carmelo Salguero, director comercial de la cooperativa.
De cara al consumidor, el objetivo es proporcionarle la mejor experiencia, a través de productos sabrosos, de calidad e innovadores. La cooperativa está especializada en mini-vegetales (tomate -con diferentes variedades-, pepino snack y mini pimiento), y cuenta con una línea de tropicales (chirimoya, aguacate y mango) que prevé que crezca para garantizar su comercialización en países europeos. Por otro lado, ha desarrollado nuevas líneas con variedades de tomatede más calibre y especiales, como el recientemente incorporado ‘Amela’, que une dulzura y cualidades organolépticas excepcionales. “Se trata de un tomate gourmet de reconocido prestigio en Japón que ahora se hace realidad en Europa”, explican. También ha incorporado en los últimos años el tomate ‘Adora’, proyecto en el que también participan otras empresas como Casi, Unica Fresh y Biosabor.