Tres años consecutivos de caídas en la producción, si bien moderadas, ponen de manifiesto que el sector de aguas envasadas tocó su techo en 2006, año en el que se alcanzaron los 5.765 Ml. Y con la coyuntura actual, es muy poco probable que en corto espacio de tiempo se recupere ese nivel. El escenario es similar al del pasado ejercicio, de manera que el consumo en la distribución apenas se ha resentido, mientras que en horeca sigue en caída libre. Así las cosas, los pequeños y medianos envasadores resisten los ataques de todos aquellos operadores que pueden permitirse una sangría en sus cuentas, aunque, como todos los años, hay que lamentar nuevas bajas.
Aunque la contienda de precios que vive el sector ha repercutido también en el negocio del líder indiscutible del sector, Aguas Font Vella y Lanjarón, que se ha visto obligada a entrar en las promociones debido al retroceso experimentado por 'Font Vella' y 'Lanjarón'. Por el contrario, y de forma paradójica, otros dos históricos del sector como 'Aquarel' y 'Bezoya' viven momentos de esplendor, de modo que han recortado las diferencias que le separan de la filial de Danone gracias a crecimientos de doble dígito.
Pese a todo, los grandes operadores tantean el terreno para proseguir con sus planes de expansión, ya que no quieren dejar escapar la oportunidad de estar presentes en la región donde más agua envasada se consume, el arco mediterráneo. Así, Nestlé Waters no descarta levantar otra planta de envasado; Damm ha anunciado su intención de acercarse aún más a Levante; Importaco ha irrumpido en Agua de Cortés; y Fontvella mantiene en cartera su proyecto de Villena (Alicante).
Todos estas cuestiones se han analizado con mayor profundidad en el informe especial sobre aguas envasadas publicado por la revista ALIMARKET en su número de mayo.