El Real Decreto aprobado el pasado mes de noviembre por el Consejo de Ministros a instancias del titular de Agricultura, Miguel Arias Cañete, por el cual se imponía el uso en hostelería de envases de aceite irrellenables a partir del 1 de enero de 2014 -con una prórroga para finalizar las existencias de los establecimientos que concluía el pasado 28 de enero- se convirtió en una importante oportunidad para el sector taponero.
Aprovechando la entrada en vigor de esta nueva legislación, Guala Closures amplió su oferta para aceites y vinagres con tres nuevas referencias. La más destacada fue ‘Verso’, un nuevo sistema patentado por la compañía formado por un vertedor que aparece con cada apertura del tapón de rosca de aluminio y se repliega al cerrar la botella, garantizando un cierre limpio del tapón. Además, la forma de su boquilla, evita cualquier tipo de goteo en la botella y permite dosificar el aceite, con un vertido a una velocidad uniforme y controlada. Junto a ‘Verso’, trajo a España los modelos ‘Olio 1031’ y ‘Alusnap Olio’, ambos irrellenables y con el sistema “tamper-evident” antifalsificación, incorporado. A éstos se unió además, una amplia selección de cierres cortos, de aluminio, con cuello diseñado para enroscarse al cuello de la botella y sistemas de vertido anti-goteo o de control de flujo incorporados. Grupo Torrent, por su parte, más allá de dar a conocer sus referencias para el sector -los modelos ‘V90’, ‘Captor’ y ‘Gades’- puso en marcha la campaña divulgativa “Garantizamos el origen” dirigida a productores y consumidores y orientada a dar a conocer los beneficios del uso de cierres irrellenables para las botellas de aceite. Mientras, el grupo RB Packaging presentó en el mercado una gama de cierres irrellenables tras invertir alrededor de 250.000 € en el desarrollo de sus moldes. La familia ‘VS’, comercializada a través de su filial Veroil Caps, está formada por tres referencias, de las cuales, tan solo el modelo ‘VS4’ está pensado especialmente para los productores de aceite para el canal horeca, al estar fabricado con poliestireno que evidencia cualquier tipo de manipulación y permite su montaje en cualquier tipo de envase estándar de aceite. El resto, los sistemas ‘VS2’ y ‘VS3’, están diseñados para envases de aceite para su comercialización en grandes superficies.
La última en comenzar la producción de cierres irrellenables para el sector del aceite y vinagre ha sido la vizcaína Embalajes Plásticos de Sopelana, conocida como Embalatap. Centrada en el mercado alimentario desde principios de ésta década, tras hacerse con los activos para este negocio de Goiplastik, Embalatap no ha querido perder la oportunidad de presentar su propuesta para un sector que ya genera la mayor parte de sus ingresos. Así, ultima el inicio de la producción industrial de ‘Abra’, un nuevo desarrollo para botellas de PET o vidrio, siempre y cuando tengan un cuello 29/21. Su carácter irrellenable se logra gracias a las tres piezas que lo conforman: un tapón de bisagra, un vertedor y una membrana, que se desplaza ayudada por la gravedad y el propio empuje del aceite liberando o tapando los orificios del vertedor.