El espectacular crecimiento del comercio electrónico en los últimos años está ejerciendo más presión sobre la industria de fabricación y logística. Con una competencia más dura y las expectativas de los clientes más altas, la prioridad es suministrar los pedidos lo más rápido posible al tiempo que se garantiza la trazabilidad. En un entorno de trabajo con un ritmo tan acelerado, existe una gran demanda para que las soluciones de etiquetado sean rápidas y fáciles de instalar y operar, así como fiables y versátiles. En este artículo, Richard Scott, gerente de productos para el mercado europeo de Sato, explica lo que los fabricantes de impresión y etiquetas están haciendo para hacer frente a este reto.
El comercio electrónico ha crecido de forma constante durante la última década. Por ejemplo, en la UE, el porcentaje de compradores online se ha más que duplicado entre 2004 y 2013, pasando de un 20% a un 47% de la población y el comercio electrónico ha alcanzado una facturación de 363.100 M€, con más de 3.700 millones de paquetes enviados anualmente. La exigencia de los clientes que quieren productos a un coste inferior y de manera más inmediata ha impulsado este crecimiento. Una normativa actual de la UE ha fijado una meta de que el 50% de la población de la UE compra online y el 33% de las pymes realizarán compras/ventas por internet de aquí a finales de 2015 y esto, inevitablemente, tendrá un impacto en las industrias de fabricación y logística.
A medida que el número de compradores online crece y más empresas se pasan al comercio electrónico, el mercado de la fabricación y la logística se acelera y la competencia es cada vez mayor. Es por ello que los procesos rápidos como el cross-docking –en el que el material se descarga de un camión entrante y se carga directamente en camiones salientes sin que haya almacenamiento de por medio o este sea muy breve– se están generalizando cuando se trata de suministrar los pedidos. Una pieza fundamental del equipamiento para asegurar que los productos se entreguen en el lugar correcto y a tiempo son las impresoras de etiquetas.
Para garantizar que el proceso de etiquetado se haga de manera eficiente y consistente en un entorno de trabajo con un ritmo tan acelerado, las empresas de logística son las primeras en exigir soluciones de impresión de etiquetas con código de barras que sean rápidas, ágiles y fáciles de instalar y operar. Puesto que algunos fabricantes ofrecen la entrega incluso en el mismo día, siempre y cuando los pedidos se hayan hecho antes de mediodía, estos tienen que confiar en un equipo que produzca etiquetas de forma rápida y eficiente. ¿Pero, qué factores claves hay que tener en cuenta al especificar impresoras? Además, dado que las empresas están cada vez más globalizadas, con entregas por todo el mundo, las organizaciones necesitan una impresora “universal” que se pueda utilizar con facilidad, independientemente del entorno operativo, el idioma o la infraestructura.
Las impresoras que son rápidas y fáciles de instalar y mantener ayudan a reducir el tiempo de inactividad y mejorar la productividad. Para las empresas que a menudo trabajan 24/7, reducir el tiempo de inactividad es clave para responder a las solicitudes de los clientes con eficacia al tiempo que se mejora la eficiencia operativa. Minimizar los costes asociados con el mantenimiento también puede contribuir considerablemente a mejorar el resultado.
Las impresoras plug & play, que son fáciles de instalar, sin necesidad de técnicos de instalación, y que pueden imprimir inmediatamente son las preferidas. Las impresoras que han sido diseñadas para que los usuarios puedan sustituir las piezas, sin tener que llamar a ningún técnico, también son preferibles. Los últimos modelos de impresoras, como la serie 'NX' de Sato, están diseñados para que las piezas se puedan reemplazar rápidamente. Las “piezas de desgaste”, como el cabezal de impresión y el rodillo de la platina, se cambian rápidamente sin necesidad de herramientas; también hay vídeos de ayuda disponibles en la pantalla frontal, para ayudar con el mantenimiento.
Las impresoras que son intuitivas y fáciles de operar reducen el tiempo de formación del personal. En la UE, las tasas de rotación del personal son cada vez más altasiv, y las empresas buscan impresoras de etiquetas que cualquier persona, con poca formación o sin formación alguna, pueda utilizar. Con la libertad de circulación dentro de Europa y el uso de 24 idiomas, las impresoras que se están diseñando ofrecen múltiples idiomas entre los que el usuario puede seleccionar. Por ejemplo, la pantalla de la 'NX' de Sato se puede leer en hasta 31 idiomas de todo el mundo.
Para mayor facilidad de uso, algunas de las impresoras de etiquetas más recientes están diseñadas para manejar una amplia gama de medios, incluyendo etiquetas de diferentes tamaños y el software de diseño de etiquetas individuales, y grandes aberturas del cabezal para una instalación fácil de los materiales, sin que sea necesario un rollo de cinta. Además, algunos de los últimos modelos de impresoras cuentan con grandes pantallas de 3,5 pulgadas a todo color que incluyen iconos para hacer operaciones de manera intuitiva y con videos de solución de problemas, que ofrecen una sencilla guía paso a paso para los usuarios.
Para garantizar la fiabilidad en entornos exigentes de fabricación y logística, las impresoras tienen que ser resistentes. Las piezas esenciales de las impresoras de etiquetas modernas, como la estructura, la placa base y el cabezal de impresión, se tienen que fabricar con materiales muy fuertes, como el aluminio fundido a presión. Este diseño ofrece una mayor durabilidad además de reducir al mínimo el riesgo de arrugas de la cinta para lograr una impresión de alta calidad constante.
En muchas ocasiones surge la necesidad de generar un diseño de una etiqueta en una ubicación para luego imprimirlo de forma remota desde otra. Es importante que las impresoras puedan conectarse fácilmente a la red a través de sistemas basados en la nube e Internet, pero con un alto grado de seguridad. Las impresoras que incluyen todas las comunicaciones más modernas, tales como Wi-Fi y Bluetooth, ofrecen el nivel más alto de conectividad.
La calidad de impresión, el procesamiento y la velocidad de rendimiento
Se requieren impresoras de uso industrial para imprimir grandes volúmenes de etiquetas rápidamente y a menudo se necesitan velocidades de rendimiento de hasta 10’’ por segundo. Para ofrecer esto, la última generación de impresoras incluye procesadores de doble núcleo. Las impresoras como las de la familia 'NX' de Sato están equipadas con 100 MB de memoria accesible por el usuario que permite formatos, grandes gráficos y fuentes personalizadas además de proporcionar la velocidad de procesamiento más alta en su categoría y un excelente rendimiento, lo que también es esencial cuando se trata de suministrar pedidos con la mayor rapidez posible.
Las impresoras también incluyen varios componentes para el control de la cinta de tinta y la posición de las etiquetas para garantizar la calidad de impresión en una tirada larga y una gran precisión de la posición de la impresión en una etiqueta.
La escalabilidad y versatilidad también son factores claves cuando se trata de la impresión de etiquetas en el actual mercado de la logística. Como cada vez hay más compañías que se pasan al etiquetado RFID, se observa una creciente demanda de soluciones escalables que puedan actualizarse y ampliarse posteriormente. Algunos de los últimos modelos de impresoras de etiquetas también están diseñados para permitir la integración y expansión a través de un acceso remoto y la configuración con una alta seguridad, lo que garantiza la conectividad múltiple a través de programas específicos y plataformas tecnológicas comunes.
Algunos de los últimos modelos de impresoras también ofrecen diseños que ahorran espacio. Por ejemplo, la 'CL4NX' de Sato ofrece el 53% menos de ancho y el 27% menos de altura en comparación con los modelos anteriores. De esta manera, ocupa muy poco espacio y es una perfecta solución, fácil de instalar y lista para la impresión de códigos de barras y el apoyo a los sistemas de gestión de existencias en stock y pedidos.
Las empresas de fabricación y logística también buscan soluciones que les permitan almacenar más datos en las etiquetas de código de barras. Se ha registrado un crecimiento en el uso de respuesta rápida (QR), Datamatrix y otros dos códigos bidimensionales. Uno de los motivos es que, con las nuevas normas de etiquetado en vigor en los últimos años, las empresas están obligadas a proporcionar información más detallada sobre sus productos. Por ejemplo, las empresas de alimentos ahora deben cumplir con la Directiva Europea 1169/2011 sobre etiquetado de los alimentos, que estipula que las etiquetas deben contener información fundamental para los clientes, como el origen de la carne fresca, frutas y verduras, así como la presencia de alérgenos y gluten.
Teniendo en cuenta esta cuestión, las impresoras actualmente ofrecen mayor capacidad de memoria para poder manejar grandes volúmenes de datos eficazmente, a menudo en diferentes idiomas. Por ejemplo, puede ser que las empresas que exportan alimentos a diferentes países tengan que imprimir etiquetas con información detallada sobre el origen de alimentos y los ingredientes en diferentes idiomas o incluso en diferentes caracteres alfabéticos.
También hay una tendencia hacia el uso de productos de uso común, como impresoras, de la misma familia que comparten características y piezas fundamentales. Dependiendo de la aplicación, las empresas tienen que imprimir diferentes tamaños de etiquetas (generalmente cuatro o seis pulgadas de ancho) y las familias de productos les permiten hacerlo con una impresora exactamente igual pero en un tamaño diferente. Una ventaja evidente consiste en que no hace falta ninguna formación adicional del personal cada vez que se introduce un nuevo producto y la necesidad de almacenar piezas de recambio nuevas se minimiza. Esto puede beneficiar a los distribuidores en particular, ya que pueden ahorrar en costos de almacenamiento a la vez que se pasa menos tiempo formando a técnicos.
En definitiva, lo que algunos de los últimos modelos de impresoras de etiquetas ofrecen es una solución “multifunción universal”. Se trata de impresoras en múltiples idiomas para satisfacer las necesidades de las empresas cada vez más internacionales en un mundo globalizado y para cumplir con todas las normativas internacionales, lo que significa que el mismo modelo se puede utilizar prácticamente en todos los países.