En un momento en el que los avances tecnológicos avanzan un mundo con cambios sociales y de hábitos de gran calado, la industria del gran consumo se prepara para un nuevo escenario en el que el cliente final será más exigente que nunca y tendrá unas prioridades muy marcadas. Si en el siglo pasado, las cuestiones culturales y económicas eran las que marcaban el perfil del consumidor y sus necesidades, la situación ahora es mucho más compleja. El comprador está en una fase de evolución en la que la combinación precio-calidad ya no basta para empujar elegir el producto.
Ahora se buscan un proceso que genere una experiencia positiva y que, además aporte un valor añadido de cara a las necesidades particulares de cada uno. El momento es especialmente llamativo porque se está produciendo un periodo trascendental de cambio en la medida en que se incorpora al mercado una nueva y muy esperada generación, los 'Millennials'.
En los últimos diez años se ha analizado en profundidad qué es lo que buscan los miembros de la “Generación Y” con conclusiones que, inevitablemente, afectan al mundo del E+E. La necesidad de envases más versátiles, que aumenten la seguridad y que transmitan conceptos como el gusto por lo local, la sorpresa o el respeto al medio ambiente son algunos de los elementos que deberá de tener en cuenta el envasador a la hora de elegir materiales y formatos. Pero la cuestión es que el nuevo packaging no puede ser una cuestión exclusiva de los 'Millennials'.
El consumidor dominante hasta ahora, miembro del baby boom (nacido entre 1960 y 1980), está también mutando gracias a su conexión directa con todas las nuevas tendencias y, además, poco poco va evolucionando hacia un perfil senior, un segmento que va a ganar un tamaño más que considerable en las economías desarrolladas de aquí a 2050 y que tiene unas necesidades muy específicas con respecto a su packaging.
Entre medias, se avecina un cambio aún más trascendental, la llegada de los 'Centennials', la primera generación puramente digital, a la que todos los estudios apuntan que hay que empezar a ganársela ya, debido al peso que tiene en sus decisiones de consumo la reputación de marca.
Asimismo, el comercio está dando un giro en su forma de venta con la popularización de la venta online, que ha servido para que, de nuevo, se ponga el foco en el consumidor, que por primera vez se implica en la forma en la que quiere recibir sus pedidos imponiendo un criterio basado en la seguridad y el medio ambiente. El último número de la Revista Alimarket incluye un Informe dedicado a las tendencias en innovación para packaging que delimita cuáles serán los cambios más relevantes que demandará cada generación de consumidor en el mundo del envase, así como las innovaciones que triunfarán en el sector del embalaje en base a los datos obtenidos en una encuesta de elaboración propia en la que han participado más de 300 empresas del sector de gran consumo.