Smurfit Kappa y Grupo Suca han celebrado un Workshop para mostrar cómo la innovación ayuda a esta cooperativa hortofrutícola andaluza a encontrar ahorros para sus asociados a través de la optimización del embalaje. Un proceso que, además, le permite reducir su huella de carbono.
Celebrado en las instalaciones de Suca, este encuentro ha mostrado cómo optimizar el aprovechamiento óptimo de la carga, la mejora en el espacio de almacén y de las operaciones de reposición, la optimización del transporte de cada envío o la presencia más eficiente del producto en el punto de venta gracias al embalaje se convierten en factores clave para encontrar ahorros en todo el proceso logístico. El objetivo es evaluar los riesgos, entender las oportunidades y mejorar la eficiencia de su cadena de suministro explorando todas sus posibilidades.
Por ello, soluciones como la bandeja Goliath para productos como los pimientos o los cítricos son capaces de mejorar la eficiencia de carga, permitiendo un apilamiento perfecto y reduciendo un 50% su peso respecto a otro tipo de embalajes. O la innovadora P84/13 Doble Cónica para tomate, pepino, cherry o calabacín, que ocupa menos espacio, es más resistente, emite menos CO2 al ambiente y genera menos desperdicio. Sin olvidar la gama de barquetas 'Safe&Green' para los productos agrícolas frescos, cuyo diseño es totalmente personalizable y 100% renovable, reciclable y biodegradable.
José Antonio Rodríguez Vázquez, gerente de Suca, asegura que “gracias a este workshop con Smurfit Kappa hemos conseguido mejorar la competitividad de nuestros asociados a través de la optimización del embalaje, ayudándoles a reducir costes, incrementar ventas y mitigar riesgos en sus cadenas de suministro, sin olvidar la reducción de su huella medioambiental”.
Por su parte, Miguel Hernández, gerente de Smurfit Kappa Almería, añade que “para nosotros es muy importante poder trabajar de forma conjunta con Suca para encontrar ahorros en su cadena de suministro y las de sus asociados, a través de un embalaje adaptado a las necesidades específicas de sus principales mercados. No cabe duda de que la innovación es primordial para poder ofrecerle una propuesta de valor diferencial y altamente competitiva, que demuestra que incluso pequeños cambios en el embalaje pueden generar un gran impacto positivo en su logística. Este workshop ha marcado la senda de cómo el sector agrícola apuesta por la innovación para encontrar ahorros y mejoras en su operativa diaria. El resultado ha sido una mayor racionalización del packaging, que supone importantes ahorros con la consiguiente mejora de la rentabilidad y cuyo valor real llega incluso al retailer”.