El sector vitivinícola y la industria corchera se han unido en el Grupo Operativo SensoVI que tiene por objetivo aumentar el conocimiento del efecto que tiene sobre los vinos espumosos el uso de tapones de corcho durante su segunda fermentación, en lugar de los actuales tapones corona.
En el proyecto, que contará con un presupuesto de casi 250.000 € y estará coordinado por el Icsuro, colaboran compañías como Recaredo, elaborado especializada en vinos de larga crianza; Grupo Gramona, una bodega familiar especializada en vinos espumosos artesanales, de larga crianza y que ya emplea el tapón de corcho para este proceso, y las corcheras Francisco Oller y Tapones y Especialidades del Corcho. A estos se suman centros de investigación como el Instituto Catalán de la Viña y el Vino (Incavi), el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (Irta) o la Fundación Instituto Catalán del Corcho.
El objetivo del proyecto es mejorar la competitividad de las explotaciones vitivinícolas a través del estudio de la aportación que realiza el uso de tapón de corcho durante el proceso de tiraje (segunda fermentación del vino espumoso) en lugar del tapón corona. Además, implica al sector corchero, que abordará el desarrollo de un nuevo tapón de corcho adaptado a las condiciones de esta segunda fermentación, producto que será posteriormente validado de forma analítica y sensorial, así como a través de un estudio de percepción del consumidor final.
El desarrollo de tapones adecuados a este proceso supone una oportunidad para incrementar el volumen de negocio potencial del sector corchero, e incidirá de forma positiva en la cantidad de superficie de bosque de alcornocal gestionado de forma sostenible en Cataluña.