Puig finalizó 2017 con ventas de 1.935 M€ (+8,1% a nivel reportado, 8,6% a igualdad de negocio y sin tener en cuenta las oscilaciones del cambio). Pese a superar el crecimiento medio del mercado no llegó a alcanzar sus previsiones, ya que estimaba rozar los 2.000 M€, según el plan desarrollado para el trienio 2015-2017. No obstante, en esos tres años el aumento porcentual registrado ha sido del 28%. Los beneficios han arrojado mejores cifras, al situarse en 228 M€ (+47%). El mercado español ha acaparado el 15% de las ventas (+7%), frente a los mercados desarrollados (norteamérica + UE -excepto España-), que han registrado una evolución del 8%; y de los mercados emergentes (resto), que han aumentado un 9%. Un 39% de los 4.472 empleados con los que contaba el grupo en 2017 trabajaban en España.
En la evolución de Puig durante el último año cabe señalar el primer lanzamiento femenino fruto de la alianza con Jean Paul Gaultier, 'Scandal'; el afianzamiento de 'Good Girl', de 'Carolina Herrera', por segundo año consecutivo, en el ranking de fragancias femeninas más vendidas, así como su desembarco en el mercado estadounidense; el incremento de la oferta de 'Paco Rabanne' con 'Pure XS', y el desarrollo de Prada en sus principales mercados. Las enseñas nicho, 'Eric Buterbaugh', 'Panhaligon's' y 'L'Artisan Parfumeur', las dos últimas vinculadas a la distribución de lujo, han registrado crecimientos de doble dígito. A estas novedades se sumaría, ya en 2018, el acuerdo a nivel mundial con Christian Louboutin para impulsar su negocio de cosmética y fragancias. Otro hecho a tener en cuenta ha sido el incremento de participación, hasta suscribir la mayoría en el negocio de perfumería de Eric Buterbaugh (EB Florals).
Para el presente ejercicio Puig ha previsto fortalecer tanto el travel retail como su presencia en el mercado asiático. Además de continuar con las acciones sociales que está llevando a cabo, entre las que destaca el programa Invisible Beauty, desarrollado junto Ashoka, Puig ha puesto en marcha Puig Futures, una plataforma para "conseguir la mayor experiencia de consumo, las marcas más adaptadas a este nuevo escenario y los itinerarios de compra más convenientes en el sector". Con ello se pretende colaborar con la industria, tanto a través de nuevas start-ups o con clientes y proveedores ya existentes, apoyando los proyectos más innovadores que permitan reinventar la categoría de fragancias. Puig, que confía en continuar creciendo por encima del mercado, sitúa por encima del 5% su crecimiento para el presente año, aunque la previsión de un impacto negativo del tipo de cambio y el cambio de regulación de la norma de reconocimiento de ingresos podrían neutralizar este crecimiento en cifras reportadas. La empresa continúa volcada en adaptarse a las exigencias del nuevo consumidor, especialmente al digital, las redes sociales, los cambios en la distribución y la aparición de nuevos jugadores nicho. Puig ha manifestado su intención de alcanzar ventas de 3.000 M€ en 2025.