El Gobierno de Extremadura presentó el pasado fin de semana el nuevo modelo de gestión de residencias que pretende adoptarse en la región extremeña, en una comparecencia conjunta del Consejero de Sanidad y Servicios Sociales José María Vergeles y el director gerente del ServicioExtremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (Sepad), José Vicente Granado. El director gerente del SEPAD explicó el nuevo modelo, que está basado en cuatro puntos: un protocolo de intervención ante posibles brotes; la definición de la cartera de servicios residenciales; una nueva gestíón que potencie la dimensión sanitaria en los centros; y un sistema de información coordinado entre el ámbto sanitario y sociosanitario.
El modelo propone la división de los centros en tres categorías "similar a las estrellas de los hoteles", según Granado, que clasifica a los centros en básicos, óptimos y excelentes. Para ello las residencias habrán de ser inspecciondas periódicamente, para evaluar si cumplen con los criterios de la categoría en la que estén. Por ello, el plan necesitará un potente departamento de calidad, más recursos humanos y materiales y el refuerzo en las tareas de la inspección,que será quien autorice y supervise la apertura de centros residenciales.
No obstante, en esta nueva etapa, el objetivo de la Junta es trabajar para que los mayores no tengan que ingresar en un centro residencial. Según Granado se trata de la "no institucionalización de la gente de edad en los centros residenciales, en eso es en lo que trabajaremos, especialmente en los centros municipales". La idea es convertir los centros pequeños en servicios o estancias donde se van a realizar los servicios de acompañamiento a la soledad, servicios de catering, etc. pero manteniendo el mayor su domiilio en casa. Así, el perfil de las personas que entren en los geriátricos corresponderá al de personas convalecientes por alguna enfermedad, que necesiten rehabilitación, cuidados médicos que puede prestar una residencia, porque no es necesario su ingreso hospitalario. En este sentido, Granado confirmaba que "va a ser un retoque a toda la gestión de los centros residenciales, adaptándolos e individualizando las atenciones a cada persona y priorizando la no institucionalización de las personas de edad en las residencia".