Grupo Vieira continúa quemando etapas en su crisis particular. Después de aceptar a finales del pasado mes de julio el concurso necesario de acreedores para Eduardo Vieira, sociedad matriz del conglomerado -57 M€ de deuda-, y de solicitar concurso para su filial Vigoca Elaborados y preconcurso para Vieira Distribución, a mediados de octubre solicitaba ante el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Vigo concurso voluntario para las sociedades Puerto Vieira, La Plaza Congelados y la citada Vieira Distribución, colocando en situación concursal todo el grupo de empresas responsables de su actividad productiva y comercializadora en productos del mar, si bien el juzgado aún no ha declarado en concurso a ninguna de ellas.
De forma paralela, Grupo Vieira ha venido aplicando en estos tres últimos meses sendos Expedientes de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) en algunas de sus sociedades, como es el caso de Vieira Distribución, dedicada a la comercialización de toda la gama de productos congelados para Galicia -concesionaria de Unilever para la distribución de "Frigo" en la zona centro de Galicia-, con sede en Santiago de Compostela y delegaciones en Ourense, Lugo y Vigo; y Eduardo Vieira, que afectaría al 100% de la plantilla, según fuentes sindicales. Por contra, Puerto Vieira, frigorífico con sede en Redondela (Vigo) y constituida como centro logístico del grupo para la distribución de sus productos en España y Europa no se ha visto afectada hasta la fecha por este tipo de medidas.
Fuera de nuestras fronteras, el grupo continúa a la espera de la decisión de un Juzgado Federal argentino, que debe decidir en los próximos meses si ratifica la validez de los fundamentos legales argumentados por la Cámara de Diputados de la provincia de Santa Cruz en la expropiación de los activos de Vieira Argentina, que actualmente continúa intervenida por la provincia. Los problemas de Vieira se extienden también a su sociedad en Namibia, Calidu Fishing, en la que ha venido presentando impagos a sus trabajadores, lo que ya habría provocado varias jornadas de paro en las instalaciones de Walvis Bay.