El último estudio realizado por el Observatorio de Precios del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) sobre la cadena de valor del pimiento verde pone de manifiesto que nuestro país es el quinto productor mundial de pimiento y el tercer país exportador, con un volumen aproximado de 444.485 t en 2008, cerca del 45% de la producción nacional.
Según este informe, en el precio final del pimiento tienen gran peso los costes de confección, un 81% en la cadena de valor tradicional y un 82% en la cadena moderna, como consecuencia de la baja mecanización de la actividad por la sensibilidad a los golpes y abrasiones de esta hortaliza. Además, los distintos formatos de envases empleados en la confección también influyen en el precio final, aunque el 85 % del pimiento que se consume se compra a granel. Respecto al beneficio acumulado, éste se mueve entre el 15% de la cadena tradicional y el 14% de la cadena moderna. El estudio destaca que, generalmente, los agentes que comercializan mayores volúmenes y disponen de una oferta de productos más amplia obtienen menores márgenes netos que compensan con los beneficios que reporta la venta de otras variedades de pimiento o de otros productos.
Como conclusión, señala diversas oportunidades para el desarrollo del sector, como la reducción de los costes unitarios de producción mediante la mejora tecnológica de los invernaderos y la mecanización del cultivo, así como la mejora de las técnicas de manipulación y clasificación del pimiento directamente en el campo para minimizar las mermas y el coste de la manipulación en la central hortofrutícola.