Lavinia, especializada en la distribución de vinos y bebidas espirituosas, prevé cerrar la tienda que tiene en la calle Ortega y Gasset de Madrid, que se había convertido en todo un referente en el sector vinícola de la capital. El establecimiento, que tiene 1.000 m2 y combina una amplia oferta comercial dentro de este sector, con servicios de restauración, se clausurará al término del próximo mes de enero al no alcanzar un acuerdo para renovar el alquiler del local en el que se encuentra.
Este hecho provocará una reestructuración de la compañía que incluirá la presentación de un ERE de extinción para parte de su plantilla, que podría prácticamente reducirse a la mitad. La compañía da empleo a más de 50 trabajadores, de los que una veintena operan en su flagship. Con esta operación, Lavinia se centrará por el canal de venta online, aunque mantiene su apuesta por las tiendas físicas, tras la apertura hace apenas dos meses en el C.C. 'LaFinca Grand Café' de Pozuelo de Alarcón. Esta última cuenta con 75 m2 y está en línea con el comercio que ya tiene en el C.C. 'Moraleja Green' de Alcobendas.
Las ventas detallistas de Lavinia suponen un 65% de sus ingresos, según el informe de gestión de la empresa correspondiente al ejercicio 2021-2022 -cierra en junio-. En dicho año, alcanzó una facturación de 10,89 M€, un 6,5% más que el ejercicio anterior, correspondiendo 7,11 M a las tiendas (+10%), mientras que el resto provino de otras actividades de eventos y servicios de restauración.