Aunque el sector logístico no está siendo el principal damnificado por la crisis del coronavirus, dado su papel esencial como suministradores de productos de primera necesidad, compañías especializadas en sectores concretos (electrónica, textil, moda, etc.) empiezan a resentirse. Logisfashion, especialista en servicios logísticos para el mundo de la moda, ha sido una de las primeras empresas del sector en presentar un ERTE.
En concreto, la medida afectará a 3 de los 7 centros logísticos que opera en España y a un 35% de sus 188 empleados. Las tres plataformas a las que se alude serán las ubicadas en Santa María de Palautordera (Barcelona), Cabanillas del Campo y Fontanar (ambas localidades de la provincia de Guadalajara). "Nuestros clientes han cerrado sus tiendas y eso nos impacta directamente. Estamos reajustándonos a la situación", explican fuentes de la compañía. Logisfashion trabaja con una amplia lista de grandes empresas del sector moda y complementos como Gocco, Tous, Tommy Hilfiger, La Perla, Hackett, Perry Ellis, Amazon, Privalia, El Ganso, Steve Madden, Miniso, Crystal, Decathlon, Pikolinos, Pronovias, Castañer, Funidelia, Swarovski, Samsonite, Brooks and Brothers, Sol`z, Sfera y Hurley, entre otros.
A través de un comunicado, explica que toma esta decisión "extraordinaria en un momento también extraordinario para garantizar la salud de sus trabajadores y la viabilidad de la empresa, mientras dure la crisis derivada del COVID-19", pero destaca que el objetivo a largo plazo "es salvaguardar los puestos de trabajo de sus empleados y mantener su capacidad para retomar la actividad a pleno rendimiento tan pronto como las circunstancias lo permitan".
Juan Manzanedo, CEO de Logisfashion, ha señalado que "se trata de una medida temporal que responde a un momento muy delicado para la economía y para la sociedad en general". Según Manzanedo, "todos los puestos de trabajo están garantizados. Cuando este proceso llegue a su fin, estaremos preparados para iniciar con fuerza y todos los recursos posibles el camino de la recuperación".
La incertidumbre del actual momento podría poner en dificultades el objetivo que Logisfashion se había fijado para el presente año, en el que esperaba alcanzar una facturación de 62 M€ y que supondría un incremento de más del 20% frente a los 50 M registrado en 2019. Igualmente, quedarán momentáneamente en stand-by las nuevas aperturas que estudiaba de cara al futuro y que pasaban por seguir incrementando su presencia en el continente americano y aumentar su implantación en Europa, estrategia que ya inició con la apertura en Alemania de su primer centro europeo fuera de España.
A día de hoy, la red de Logisfashion esta compuesta por 23 centros logísticos con una superficie conjunta de 362.000 m2 y distribuidos por Europa, América y Asia. La apertura más reciente tuvo lugar la semana pasada, con la entrada en funcionamiento de su tercera plataforma en México.