El mercado de perfumería y cosmética en Vietman cuenta con un importante potencial de crecimiento, aunque aún supone retos para las empresas extranjeras interesadas en invertir en él. Según un estudio publicado por el Icex elaborado por la Oficina Económica y Comercial de España en Ho Chi Minh, factores como el crecimiento de la clase media, la incorporación femenina al mundo laboral y una población cada vez más preocupada por la higiene personal y la imagen están beneficiando el crecimiento del sector.
Así, en sólo 4 años el tamaño del mercado se habría casi duplicado entre 2011 y 2015, desde cerca de 695 M$ hasta más de 1.200 M. Asimismo, según datos aportados en dicho informe, las previsiones estiman una tasa de crecimiento interanual para el periodo 2016-2020 en torno al 6-7%.
Vietnam importa principalmente productos para el cuidado de la piel (47% del total) y tiene como principal país de origen Tailanda, seguido de Corea del Sur y Estados Unidos. En este sentido, actualmente el porcentaje que representan las empresas españolas es residual. En cuanto a la oferta, el estudio destaca que las grandes multinacionales del sector acaparan altas cuota de mercado (cuatro empresas controlarían el 50% del mercado). Cabe destacar que, a los limitados recursos financieros de las empresas locales pequeñas, habría que sumar que los consumidores prefieren adquirir productos extranjeros, a los que asocian con mayor calidad, seguridad y prestigio.
Aunque los canales de venta modernos están creciendo en popularidad, la mayor parte de la población vive en zonas rurales en las que no hay supermercados u otros formatos de distribución moderna, por lo que las ventas se concentran todavía en el canal de venta tradicional. En ello también influye que muchos consumidores están acostumbrados a comprar en los pequeños comercios locales, y que el precio en los los canales modernos suele ser mayor. En cualquier caso, apunta el informe, el sistema de distribución en Vietnam todavía está en fase de desarrollo y las infraestructuras son ineficientes. Este será, dice, uno de los principales obstáculos a enfrentarse para la introducción en el país, junto a otros como las barreras administrativas y burocráticas para el registro de productos.