D+1, holding con sede en Singapur y de capital español, ha alcanzado con Banco Sabadell un acuerdo exclusivo para facilitar la inversión a todo aquel franquiciado que desee iniciar en el mercado español la puesta en marcha de espacios de la enseña Yolé, enfocada a soft ice cream y frozen yogurt sin azúcar añadido y de la que es propietaria y franquiciadora D+1.
La línea abierta con Banco Sabadell permitirá la financiación, renting o leasing para los futuros kioscos y food trucks de Yolé, “con las mejores condiciones que hay en el actual mercado bancario español, llegando a permitir hacerse con una franquicia de Yolé con una aportación mínima”, explican desde la cadena. “En Yolé hemos sido franquiciados antes que franquicia y, por eso, desde el minuto uno hemos querido diseñar un modelo para cubrir las necesidades y carencias que otras marcas desatienden”, añaden desde Yolé.
Afincada en Singapur, la marca Yolé tiene presencia en cinco países del sudeste asiático y abrió su primera tienda europea en Lisboa el pasado mes de octubre, modelo que planea trasladar a España, previsiblemente el próximo mes de marzo y de la mano de un franquiciado con experiencia en nuestro mercado.
El acuerdo con Banco Sabadell comenzó a negociarse el pasado año y representará el arranque del proceso de expansión de Yolé en Europa, con España en su punto de mira: “Yolé viene a redibujar el modelo de franquicia de helados en España con un sistema que permite el acceso, tanto a grandes como a pequeños inversores, y que pueden encontrar en la franquicia Yolé una fórmula para el autoempleo y el desarrollo de un negocio que requiere poca o ninguna inversión inicial en un producto tan rompedor como Yolé No Sugar Added”, comenta el responsable de la franquicia en España.
Actualmente, la marca 'Yolé' está presente en seis países (Singapur, Taiwán, Camboya, Corea del Sur, Indonesia y Portugal), con más de 30 tiendas y productos en más de 600 supermercados y tiene previsto expandirse rápidamente a otros países de Europa y América. Asimismo, D+1 es propietaria de la marca de cocina española Tapas Club, enseña que cuenta actualmente con tres restaurantes propios en Asia. Por otro lado, el holding D+1 vendía a principios de 2020 sus derechos de masterfranquiciado para Asia de la cadena murciana Llaollao, mercado que había asumido en 2012.