Productos del mar y helados, las dos principales familias de producto, cerraron en negativo el año móvil finalizado el pasado mes de marzo. Sin embargo, esta caída es compensada por los platos preparados y precocinados, así como por categorías emergentes, desde la tarta salada a la bollería y panadería, mientras que el consumo se mantiene en los canales extradomésticos. En general se ha producido una mejora de la posición financiera de las compañías de congelados, que ha permitido un rebrote de la inversión, en especial de las empresas de soluciones.