La actual coyuntura económica y sectorial ha llevado a la multinacional británica de bebidas espirituosas Diageo a poner en marcha un plan de reestructuración de su negocio en Escocia para los próximos dos años y a ampliar su plan global de recorte de gastos.
Estos planes contemplan el cierre de las planta de Kilmarnock y la destilería de Port Dundas, lo que supondrá la pérdida de hasta 900 puestos de trabajo. A su vez la empresa invertirá 100 M de libras en la ampliación de la planta de envasado de Fife y en un nuevo centro de coordinación en Clackmannanshire, creando 400 nuevos empleos, con lo que la reducción de plantilla en Escocia será finalmente de unos 500 trabajadores.
Estas acciones, con las que la compañía pretente garantizar sus operaciones a largo plazo en la zona, se suman a las medidas anunciadas el pasado mes de febrero mediante las cuales el grupo prevé un ahorro anual de 100 M de libras anuales hasta 2010 y que ahora amplía en 40-50 M de libras por año hasta 2012. Este recorte de gastos le ha llevado también ha reorganizar su actividad cervecera en Irlanda, donde dispone de tres fábricas, para producir su popular cerveza 'Guinness'.
En el tercer trimestre del ejercicio en curso, cierra a 30 de junio, el grupo registró una caída en sus ventas netas del 7% , fundamentalmente por la reducción de existencias en los distribuidores de EE.UU.