La compañía Gallina Blanca Star (GBST) cuenta con un nuevo Centro Culinario que dará servicio a todas las empresas que tiene el Grupo en todo el mundo.
El conseller de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente de la Generalitat de Catalunya, Josep Maria Pelegrí ha inaugurado el pasado día 11 este Centro, ubicado en L'Hospitalet de Llobregat, población donde la Compañía tiene su sede central. En el acto, el conseller ha estado acompañado de la alcaldesa de L'Hospitalet, Núria Marín, y el CEO de GBST, Ignacio Ricou.
Con una superficie de más de 300 m2, el Centro nace con el objetivo de convertir esta gran cocina en un espacio multidisciplinario de referencia donde se llevarán a cabo proyectos de innovación aplicados a la alimentación y la gastronomía.
"Queremos que este Centro Culinario sea un espacio multidisciplinario donde converjan ideas, innovación y gastronomía en un espacio único, la cocina, con un objetivo: convertir este nuevo centro en un lugar de referencia para todas las empresas de nuestro Grupo. Un centro de innovación que permita desarrollar productos adaptados a los gustos y cultura culinaria de nuestros consumidores de todo el mundo", explica el CEO de GBST, Ignacio Ricou .
Todas las recetas son originales y propias de cada país en el que el Grupo opera. El objetivo es conseguir que los productos sean como un plato casero según la cultura culinaria de cada país en perfil organoléptico (sabor, olor y aspecto) y al mismo tiempo equilibrados desde el punto de vista nutricional.
Durante su visita, el conseller Pelegrí ha recorrido las instalaciones y ha tenido la oportunidad de conocer de primera mano la apuesta de la Compañía para una constante innovación e internacionalización como motor de crecimiento.
En la "Gran Cocina Gallina Blanca Star" se experimentará tanto con los productos ya existentes como con los nuevos productos que se prevé lanzar en los diferentes mercados donde la compañía opera: España, Italia, Holanda, Rusia, África y Oriente Medio, siempre pensando en el consumidor local, y por tanto adaptados a los gustos y las costumbres culinarias de cada uno de los diferentes países y continentes.