'Sandara', marca de vinos espumosos de Vicente Gandía, se reinventa y se presenta en un nuevo envase individual de 250 ml de aluminio. Las variedades 'Sandara Blanco' y 'Sandara Rosado', son las primeras referencias que se lanzan en este nuevo envase en los 50 países donde la marca está presente.
'Sandara' se creó hace seis años “para satisfacer las necesidades de conveniencia de los consumidores que llevan estilos de vida más actuales”, afirma Javier Gandía, Director General de Bodegas Vicente Gandía. A lo largo de su trayectoria,'Sandara' ha lanzado productos tan innovadores como el primer mojito hecho con vino blanco, un chardonnay con sake importado de Japón o un espumoso con limón.
Entre las ventajas del nuevo formato, la bodega valenciana destaca la sostenibilidad, dado que tanto el envase como el tapón están hechos de aluminio, un material 100% reciclable. Además, debido al menor peso con respecto al vidrio se reduce el impacto de la huella de carbono en un 35%. También alude a la comodidad que proporciona este material, que permite enfriar el líquido más rápidamente y lo mantiene frío más tiempo. Además, con el cierre de rosca se puede abrir y cerrar el envase tantas veces como se necesite, haciendo que se pueda llevar sin necesidad de terminar todo el contenido.
El envase de aluminio resulta conveniente para alargar la vida útil del espumoso que contiene, dado que es irrompible, lleva un revestimiento interior que protege el contacto del líquido con el aluminio y al ser opaco protege mejor el sabor ya que no se produce incidencia de luz directa. Se trata de un envase muy versátil, para consumo individual, que "abre un mundo de posibilidades que hasta ahora no estaban permitidas al envase de vidrio como son: chiringuitos de playa o piscinas, actividades al aire libre, festivales de música, etc". Debido a su tamaño y menor peso también es ideal para líneas aéreas, trenes, cruceros, tiendas de conveniencia o mini bar de hoteles.
En conclusión 'Sandara' en botella de aluminio "está dirigido a un amplio rango de consumidores que llevan un estilo de vida moderno y contemporáneo, que buscan productos que son tendencia".
Precisamente el envase de lata para vinos, que comparte muchas de las ventajas de la nueva botella de aluminio que presenta Vicente Gandía, está cobrando un cierto impulso en mercados como EE.UU., donde según un estudio de Nielsen creció en torno a un 69% en valor y un 47% en volumen en 2018 y, si bien su cuota representa menos del 1% del total de ventas, presenta las tasas de crecimiento más elevadas entre todos los formatos.