El sector de patatas fritas y snacks, englobando en estos últimos a pellets, extrusionados, cortezas y palomitas expansionadas, está atravesando un momento de transición y cambios que finalizará probablemente en 2023 y cuya foto fija en ese momento será bien distinta a la tomada hace unos años. Pese al impulso que ha supuesto la pandemia para el consumo de estos productos en retail -parte del crecimiento se quedará porque se ha normalizado la introducción de aperitivos en la cesta de la compra- y de las dudas en la recuperación de los canales out of home -algo que todavía está por definir-, el desencadenante del nuevo escenario nada tiene que ver con la coyuntura sanitaria. En 2017/2018, Mercadona decidió cambiar su modelo de proveedores, pasando de relaciones prácticamente bilaterales y de exclusividad entre cadena y fabricante para cada uno de sus determinados lineales a un sistema de “relación abierta” en las que cabe cualquier especialista. Por lo general, y con salvedades, la cadena valenciana intenta que ningún proveedor cope más del 35% de un lineal concreto, lo que a la postre significa que, al menos, tendrá tres proveedores preferentes por categoría.
Y en este cambio de modelo hacia una relación abierta, ha encontrado su máximo exponente en el lineal de patatas fritas y snacks y, especialmente, en el de las primeras, donde una misma referencia es fabricada por diferentes operadores dependiendo de la plataforma logística de destino. Las intenciones quedan meridianamente claras con este ejemplo: del top 40 del ranking de Alimarket, nada menos que 16 están presentes en Mercadona (12 con MDD) con patatas fritas y snacks con base de patata (en el caso de estos últimos, ‘Pringles’, Leng d’Or cons sus light y Grefusa con un producto similar a ‘Papa Delta’). Poner a la cadena en el centro del cambio estructural que está sufriendo el sector no es algo caprichoso. La cadena valenciana tiene una cuota de mercado en retail para esta categoría de alrededor del 30%, por lo que en la práctica supone poner en juego una gran bolsa de alrededor de 30.000 toneladas.
Alimarket Gran Consumo analiza en profundidad todos estas aspectos y la metamorfosis que está experimentando este mercado en el informe titulado "Un nuevo partido para cambiar el sector", a cuya versión íntegra puede acceder a través de este enlace. Todo esto sucede en un contexto de viento a favor, con buenos crecimientos en retail. Esto quiere decir que muchos consumidores que no incluían este tipo de productos en sus cesta habitual o que lo hacían de una manera tímida, han pasado regularizar e incrementar estas compras. Algunos estudios apuntan que el sector experimentará crecimientos sostenidos de entre el 4 y 6% hasta 2025. El ranking que acompaña la versión íntegra del informe, desvela que los 40 principales operadores del sector cerrarán 2021 con unos ingresos de unos 1.020 M, lo que supondría un avance del 7,4%, progresión que en volumen se quedaría en el 4,6%. Analizamos también las operaciones más relevantes de los distintos operadores y sus planes estratégicos.