Los accionistas de La Seda de Barcelona han aprobado en junta extraordinaria una ampliación de capital de 300 M€, tal y como ya planteó hace unos meses la dirección de la compañía , operación que ha sido ratificada por el 88,28% de su masa accionarial. Los términos de la operación contemplan una reducción previa de su capital social en el importe que corresponda para que, una vez compensadas todas las pérdidas y dotadas reserva legal y reserva indisponible, el valor nominal quede fijado en 10 céntimos de euro por título. La reserva legal que se dotará será de 6,27 M€ y la reserva indisponible de 91,62 M. La reducción servirá para compensar las pérdidas de ejercicios anteriores y las acumuladas hasta el 30 de septiembre, por un valor total de 466,5 M€
La ampliación de capital está abierta a todos los accionistas de la compañía en base a sus derechos de suscripción preferente. En caso de no ser completamente cubierta (la aseguradora Fiatc ya ha anunciado que no acudirá y que de hecho porgrama ya su salida de la compañía), está previsto que determinados accionistas significativos y un nuevo socio industrial, la portuguesa BA Vidro, puedan acudir a la ampliación mediante aportaciones dinerarias de hasta 100 M (aunque según se informó en la asamblea la inversión que realizaría el grupo luso ascendería a 65 M€ quedando el resto hasta 100 M en manos e Caixa Geral -25 M- y la sociedad Liquidambar). Asimismo, hasta la cantidad de 150 M podrá ser suscrita por las entidades que conforman el crédito sindicado de La Seda mediante la conversión en acciones de parte de su deuda.
Por otra parte, y como estaba previsto, los accionistas de la compañía han aprobado el Plan de Reestructuración con el que se pretende consolidarla como primer grupo industrial de soluciones en PET del mercado europeo. La ampliación de capital supone para La Seda un primer paso en su reestructuración que deberá contar, como condición indispensable, con el acuerdo que está ultimando con las entidades financieras.
