El grupo Grifols ha llegado a un acuerdo para adquirir la unidad de diagnóstico transfusional de la suiza Novartis por 1.675 M$ (1.240 M€). La operación, que está pendiente aún de su aprobación por los distintos organismos de competencia, se articulará a través de una filial de nueva constitución, participada al 100% por Grifols. La financiación se llevará a cabo con un préstamo puente de 1.500 M$, suscrito íntegramente y a partes iguales por Nomura, BBVA y Morgan Stanley.

La transacción parece obedecer al objetivo de Grifols de apostar por reforzar sus otras divisiones , una vez consolidada su presencia como tercer operador mundial en la producción de medicamentos biológicos derivados del plasma. En concreto, Grifols incorporará productos de diagnóstico para medicina transfusional e inmunología, incluyendo tecnología NAT (análisis de amplificación del ácido nucleico), así como instrumentación y equipos analizadores para realizar pruebas, software específico y reactivos. La operación incluye patentes, marcas, licencias y derechos comerciales, así como una planta de producción en Emeryville (California-Estados Unidos) y oficinas comerciales en Estados Unidos, Suiza y Hong Kong , entre otras. El acuerdo supone además la incorporación al grupo español de 550 trabajadores de la división adquirida a Novartis.

El grupo Grifols inició el proceso de crecimiento vía adquisiciones con la compra de activos de Alpha Therapeutic y, sobre todo, de la norteamericana Talecris en 2011, a las que han seguido otras operaciones, como la adquisición, el pasado mayo, del 35% de Aradigm Corporation . Según Víctor Grifols, presidente y director general del grupo español, "el siguiente paso lógico era potenciar nuestra división Diagnostic y durante los dos últimos años nos hemos preparado para ello".

La incorporación de este negocio de Novartis supone, en definitiva, una apuesta por hacer crecer el área de diagnóstico de Grifols que, en la actualidad, representa sólo el 4,8% de los ingresos del grupo (según los datos facilitados al cierre del tercer trimestre del año) y, previsiblemente, llegará a suponer el 20%, una vez incorporados plenamente los nuevos negocios de Novartis. En concreto, Grifols estima que los ingresos anuales pro-forma de la división Diagnostic se lleguen a situar en torno a los 740 M€, una vez consolidada esta operación.

Por otra parte, el grupo también consigue diversificar el negocio con una actividad muy complementaria a su división Bioscience (proteínas plasmáticas), ya que la actividad de diagnóstico que se adquiere a Novartis garantizará la seguridad de las donaciones de sangre para transfusiones y para su utilización en la producción de derivados plasmáticos, convirtiendo a Grifols en "una compañía verticalmente integrada, capaz de ofrecer soluciones a los centros de donación de sangre y plasma con un portfolio completo de productos para inmunohematología, incluyendo reactivos con tecnología de gel, en multitarjeta y las nuevas tecnologías de genotipado de Progenika". La operación permitirá además, optimizar los recursos destinados a post-venta.

El grupo Grifols cerró 2012 con una facturación consolidada de 2.620 M€, con más de 11.000 trabajadores, presencia en un centenar de países y 150 centros de donación de plasma, estos últimos situados en Estados Unidos. Hasta septiembre de 2013 Grifols sumaba unos ingresos de 2.046,6 M, un 4,4% más que en el mismo periodo de 2012, de los que el 92,4% proceden del mercado exterior, que ha crecido un 5,4% en los tres primeros trimestres del año. El 89% del negocio corresponde a la división Bioscence (88,5% en 2012), mientras la división Hospital representa el 3,6%; el área de diagnóstico bajaba del 5,2% de 2012 al 4,8% citado; y la división de otros negocios se lleva el 2,6% restante (2,5% en 2012). En los primeros nueve meses del año el grupo incrementó su beneficio neto un 35,3% hasta los 267 M€. En el mismo periodo, Grifols ha invertido más de 100 M€ en sus instalaciones productivas de España y Estados Unidos y otros 90 M€ en I+D.