El periodo de negociaciones entre la dirección de Coca-Cola Iberian Partners (CCIP) y los sindicatos sobre el plan de reestructuración anunciado por la compañía el pasado 21 de enero, que incluía el cierre de cuatro centros de producción y un ERE para 1.250 trabajadores, se ha cerrado en falso. En la última reunión celebrada el pasado viernes 21, el embotellador único y los representantes de los trabajadores en la mesa de negociación (pertenecientes a los sindicatos CCOO, UGT, CSI-F y USO) no lograron alcanzar un acuerdo, al mantenerse éstos en su postura inamovible de no entrar a negociar las medidas sobre el empleo propuestas por la compañía si no se revocaba la decisión de clausurar los centros de Fuenlabrada, Alicante, Alicante y Palma de Mallorca, circunstancia que no se ha producido.
Ante este desacuerdo, Coca-Cola Iberian Partners "considera inexplicable la falta de voluntad negociadora de los sindicatos, que en función de la última propuesta presentada por la compañía hubiera supuesto la aplicación del plan reduciendo a mínimos el impacto en el empleo". Como se recordará, esta propuesta contemplaba 481 recolocaciones con una ayuda lineal de 15.000 € más 500 € al mes durante dos años en caso de tralado, 525 prejubilaciones a partir de los 56 años con el 80% del salario neto y 184 bajas voluntarias incentivadas con 45 días por año trabajado hasta un máximo de 42 mensualidades más 10.000 € lineales.
Iberian Partners considera que "los sindicatos deberán explicar muy bien a los trabajadores por qué no han aceptado una oferta con unas condiciones tan beneficiosas". En el caso concreto de UGT, sus representantes señalan haber firmado un acta de desacuerdo al haberse mostrado la compañía "inflexible ante la destrucción de empleo en cada una de las embotelladoras.
En esta ocasión, el embotellador único ha contado con el respaldo explícito de la multinacional de Atlanta, que en todo este proceso había decidido mantenerse al margen. Así, una vez vencido el plazo de negociación, el director de relaciones corporativas de Coca-Cola España, Juan José Litrán, ha expresado su malestar por la decisión de los representantes sindicales de rechazar la última oferta planteada por Iberian Partners, lamentando la falta de acuerdo ante "una oferta que era inmejorable y muy ventajosa para los trabajadores".
Descontento al que se suma el director de relaciones institucionales y comunicación del embotellador único, Ángel López de Ocáriz, a quien le sorprende este rechazo "tras el apoyo recibido ayer por la mayoría de los trabajadores consultados a la oferta presentada por la compañía". Se refiere con ello a los resultados obtenidos en las asambleas de trabajadores producidas en la tarde del jueves 20 en los centros de trabajo de Andalucía, Extremadura, Canarias y Galicia, en los que la propuesta de la compañía contó con un refrendo del 91%.
Se abre ahora un plazo legal de 15 días en el que el embotellador único decidirá "la forma con la que se aplicará el expediente, sin tener que mantener unas condiciones que estaban supeditadas a alcanzar hoy un acuerdo con los representantes de los trabajadores". Plazo que, según UGT, la compañía debiera aprovechar para cambiar su posición, por lo que exige "que se propicie un proceso de diálogo y negociación entre CCIP y The Coca-Cola Co., con los sindicatos representativos, con el fin de configurar un Plan Industrial y de Empleo, dado que el ERE presentado carece de sentido ni justificación".
