Juan Gil Rabadá n , director general de la plataforma, ha explicado las “estrategias para abordar con éxito la recuperación económica”. El sector ha sufrido un ajuste brutal en los últimos años y sin, embargo, ahora mismo nos encontramos, en su opinión, con algunos datos esperanzadores-. Entre ellos, el leve repunte de la venta de viviendas y de los precios en el último año. Aunque aún son datos escasos, marcan el cambio de tendencia del sector inmobiliario. Y con todo ello, se va reduciendo el stock de pisos en el país. Para ello, Juan Gil ha destacado el papel que ha jugado la Sareb con su trabajo.
El mundo financiero ha sufrido un proceso de concentración muy importante y de ahí precisamente viene otro de los puntos positivos de la situación actual. Así, “la buena noticia es que ahora existe financiación”. Y con el crédito fluyendo otra vez, Juan Gil reflexiona sobre su procedencia. En España, el 93% de esa financiación es de origen bancario, muy alejado de otros mercados como el estadounidense donde abunda financiación externa a las entidades crediticias y se utilizan vías de alternativas como los fondos de inversión.
'Marca España'
Gil Rabadán se ha mostrado optimista y un gran defensor del país y de las capacidades de remontar la difícil situación. Así, ha apuntado algunos datos positivos de la economía española actual como el crecimiento del PIB y del empleo y los bajos costes laborales. Por contra, ha señalado el gran porcentaje de población inactiva y el importante volumen de deuda como los principales lastres.
Respecto al core business de Obralia, Juan Gil apunta a que e l sector de construcción “ha sido tradicionalmente poco proclive al cambio y a la tecnología”. Aunque eso está cambiando poco a poco. En comercio electrónico, España aún está muy verde, pero también crecerá en los próximos años. Por eso, Obralia se ha centrado en la recopilación y gestión de la información, uno de los puntos más espinosos y complejos del sector. Para concluir, Gil Rabadán ve para la construcción española, tan castigada, una recuperación lenta pero estable durante los próximos cinco años.
