Según los últimos datos sectoriales manejados, el presente 2015 podría apuntalarse de manera más o menos certera la tendencia de recuperación del mercado de electrodomésticos de gama blanca. La mejora del clima del consumo, propiciado por unas condiciones económicas más favorables (mayor confianza en el consumidor, renta disponible o expectativas de generación de empleo), confluirían en un repunte de las reformas del hogar. Y en este contexto, la renovación del parque instalado de electrodomésticos, por encima del umbral técnico de reposición, resulta clave. Así al menos se desprende de la evolución del mercado interior en el acumulado a junio. Según la patronal Anfel, en el primer semestre las ventas de la industria se incrementaron un 13,05% en volumen y un 15,55% en valor. Entretanto, el registro de GfK (salida de tienda), para el periodo enero-mayo'2015 fue de un crecimiento del 8% en unidades por un 7,8% en valor. Se trata, como se indica al comienzo, de una ratificación de un comportamiento que ya se inició en 2014, cuando el mercado logró dejar aparcar años de malos resultados y crecer un 4,1%.

Echando la vista atrás, el pasado 2014 supuso para el mercado de electrodomésticos un auténtico punto de inflexión por muchas razones. Pero sin duda la más relevante es que, a pesar de un entorno económico que todavía acusaba debilidades, el sector logró remontar ligeramente el vuelo con un crecimiento del sell-out en valor del 4,1% que lo situaba en un negocio de 1.993 M€, según recoge la consultora GfK. Dicho en otras palabras, se trataría del primer dato anual positivo que habría de tener la gama blanca tras seis ejercicios consecutivos de caídas que redundaron en una disminución del perímetro de mercado del 50%. Un dato positivo el de 2014 al que se llegaría después de encadenar 16 meses consecutivos de crecimientos.

En lo empresarial, varios fueron los aspectos a destacar. El primero de ellos, la recuperación llevada a cabo desde el grupo CNA (Cata) de todo el entramado industrial y comercial de Fagor, después de hacerse en subasta con sus activos a mediados de 2014. ¿La segunda? La consolidación del liderazgo en el mercado español del grupo BSH, que supo aprovechar precisamente la ausencia de Fagor para hacerse con el 40% del mercado.

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