El sector de la construcción lleva denunciando en los últimos años las dificultades para encontrar financiación, lo cual no sólo ha provocado la paralización de numerosos proyectos sino la quiebra de una ingente cantidad de empresas. A pesar de que la crisis en el mercado inmobiliario comenzó a ofrecer sus primeros síntomas tras el verano de 2007, hasta el tercer trimestre de 2008 la banca no empezó a tomar cartas en el asunto y decidió restringir los préstamos al sector constructor. Desde el tercer trimestre de 2008, el crédito concedido a las empresas del sector se ha reducido un 32% , o lo que es lo mismo, las entidades de crédito han dejado de prestarle 50.874 M€ .
Los datos elaborados por el Banco de España muestran cómo las empresas españolas del sector de la construcción habían recibido, al cierre de ese tercer trimestre de 2008, préstamos por valor de 156.363 M€, la cifra más elevada de la historia, y que en apenas tres años se ha reducido progresivamente hasta los 105.489 M€ acumulados en el pasado mes de junio . En 2009, el crédito al sector cayó un 14%, en 2010 un 12% y registraba un descenso en la tasa interanual del 8% hasta junio de este año . El crédito actual se reparte para proyectos de edificios y obras singulares (73.453 M€), obras públicas (16.478 M€), instalación y acabado de edificios y obras (11.323 M€) y preparación de obras (4.235 M€). Entre estos segmentos, destaca la caída de los créditos concedidos a preparación de obras, un 58% menos que al finalizar 2007, obviamente debido a la escasez de obra nueva, mientras que el descenso de la financiación para proyectos de obra pública se inició a comienzos de 2009 y desde entonces la caída del crédito acumula ya el 20%.
Los datos del Banco de España también recogen la evolución de los créditos dudosos del sector constructor. Si al finalizar 2007 los créditos de dudoso cobro apenas representaban el 0,7% (1.111 M€) del crédito total, en la actualidad esta cifra roza el 14,7%, con cerca de 15.539 M€ .
Este 'tijeretazo' de las entidades finacieras ha contribuido a que el sector haya elevado su tasa de paro en 18 puntos porcentuales (del 6,4% al cierre de 2007 al 24,9% actual) y que el número de empresas se haya reducido un 23%. Si en 2008 había registradas, según datos del Instituto Nacional de Estadística, 515.721 empresas dedicadas a la construcción -sin incluir las promotoras inmobiliarias- en la actualidad hay 394.395 sociedades que se dedican a esta actividad. En estos años, han desaparecido 71.778 empresas centradas en la construcción de edificios y 51.039 constructoras especializadas (demolición y preparación de terrenos, instalaciones, acabado de edificios, etc.) .
El ladrillo multiplica su morosidad
En cuanto al negocio inmobiliario, la financiación a empresas para el desarrollo de actividades inmobiliarias apenas se ha reducido en estos años, no porque haya promociones de obra nueva, todo lo contrario, sino por las refinanciaciones multimillonarias de grandes grupos inmobiliarios que han tenido que acometer. Si al cierre de 2007 los préstamos alcanzaban los 303.514 M€, hasta junio el dato se sitúa en 308.425 M€ . Por el contrario, se ha elevado el importe de los créditos dudosos , ya que de los 1.599 M€ de 2007 (el 0,5% del total) se ha pasado en la actualidad a 54.889 M€ (el 17,7% del crédito concedido a este sector).
En esta cifra no estarían incluidos los activos y participaciones inmobiliarias que ha tenido que asumir la banca española como consecuencia de la delicada situación de sus clientes. Si sumamos estas cantidades, la 'exposición problemática' de la banca española (créditos dudosos, adjudicados y normales bajo vigilancia) rozaría los 176.000 M€ , una cifra que constituye el 11,4% de su cartera credicia.
