La evolución sufrida en los puntos de venta y en el mercado del Gran Consumo en general, ha hecho que se vayan creando unos desajustes en las estructuras comerciales de los fabricantes que les aleja de las verdaderas necesidades y oportunidades del comercio actual. Es en este punto, donde las Fuerzas de Ventas Externas suponen una solución en términos de rentabilidad, conocimiento del terreno y entrenamiento de equipos comerciales efectivos y eficientes en el Punto de Venta.
Para ello, es muy importante que estos equipos tengan un alto grado de cualificación y potencial humano, que se integren perfectamente en los departamentos comerciales y de ventas de sus clientes, para trabajar compartiendo objetivos, estrategias y resultados.
Asimismo, hay que tener en cuenta a la hora de contratar una Fuerza de Ventas Externa que éstas no solo se deben medir en términos de costes, pues ciertamente hay un ahorro de ellos, sino principalmente en términos de rentabilidad, ya que debemos contar con factores tan importantes como la especialización en el sector y un gran conocimiento del Punto de Venta.
Por otro lado, una formación continuada a los vendedores que mejora su nivel profesional e incrementa sus resultados y por consiguiente los de sus clientes. En este aspecto, además, se asegura la realización de tareas comerciales, en forma y frecuencia exactas, en los plazos negociados por los clientes con las centrales.
Hay que destacar, que la flexibilidad que brindan a la hora de dimensionar, perfilar y ubicar un equipo comercial de manera rápida y eficaz, consigue complementar y crear nexos de unión con los equipos comerciales propios, para obtener una mayor cobertura de mercado.
Si a todas estas ventajas sumamos una metodología de trabajo estricta y una capacidad constante de incorporar los cambios del mercado a sus trabajos en el terreno, las Fuerzas de Ventas Externas se convierten en unos aliados indispensables en la estrategia comercial de todas aquellas compañías que operan en el sector del Gran Consumo de nuestro país.
