Tras haber dada por finalizada su reestructuración , Deóleo ha presentado sus resultados del primer trimestre, donde ya se han hecho evidentes las medidas tomadas a lo largo de 2011.

Asi, a perímetro comparable, su EBITDA trimestral se elevó a 19,5 M€, un 47% superior al mismo periodo de 2011. Igualmente, su beneficio neto se situó en 0,7 M€, frente a las pérdidas de 2,8 M€ del ejercicio previo. Además, el margen de EBITDA sobre ventas fue de 9,4%, mientras que Deóleo destinó el 2% de sus ingresos a la promoción de nuevos lanzamientos ('Koipesol Delice', 'Ecofríe', etc.)

Sin embargo, la facturación durante el primer trimestre descendió un 12%, hasta los 207 M€, dado, según la compañía a "la bajada de los precios del aceite de oliva en origen (-8%) y a la reducción de operaciones en marca blanca con el fin de buscar la máxima rentabilidad del capital empleado".

Por otra parte, la deuda financiera neta se redujo hasta los 660 M€, 227 M inferior a la que Deóleo acumulaba en el primer trimestre de 2011. Hay que tener en cuenta que no sería hasta el segundo semestre de 2011 cuando se cerraron las principales operaciones de venta y ajuste de la empresa: negocio arrocero, portugués (Saludaes) y de aceitunas (Acyco); cierre de las fábricas de Canarias y Voghera (Italia) y la oficina de San Sebastián; y redimensionamiento de las oficinas de Houston y Rivas).

A nivel corporativo, durante estos tres primeros meses del año, Deóleo ha nombrado a Oscar Fanjul como nuevo presidente no-ejecutivo, en sustitución de Mariano Pérez Claver, y ha incorporado a Gregorio Jiménez, ex director general de Puleva, como asesor de estrategia e innovación.