El sector de la piscina en España ha cerrado una buena primera mitad de año, en la que se ha anotado un crecimiento del 5,19% respecto a los dos últimos ejercicios. Estas cifras elevan sus previsiones de facturación a los 1.600 M€ en el conjunto de 2025. Así lo refleja el Barómetro Sectorial de la Piscina en España, elaborado por la patronal del sector, la Asociación Española de Profesionales del Sector de la Piscina (Asofap).
Según el informe, en los primeros seis meses del año se construyeron más de 24.000 nuevas piscinas, de las cuales la mitad ya están finalizadas y el resto se encuentra en curso. A estas cifras se suman casi 22.000 proyectos de renovación de instalaciones existentes, de los que aproximadamente dos tercios ya han concluido.
Estos datos reflejan la creciente relevancia de la modernización del parque de piscinas como motor de actividad para el sector. En este contexto, la optimización del consumo energético e hídrico se ha convertido en un requisito clave, tanto en obra nueva como en la renovación de instalaciones.
Uno de los retos destacados por las empresas es la falta de profesionales cualificados, un factor que está limitando la capacidad de respuesta ante la fuerte demanda actual. Pese a ello, la mayoría de las compañías mantiene una visión optimista para el cierre del ejercicio, respaldada por una cartera sólida de proyectos en ejecución o pendientes de iniciar. Para abordar este desafío estructural, Asofap ha impulsado la creación del primer Certificado Profesional del sector, una medida orientada a regular la profesión, mejorar la cualificación del personal y combatir la competencia desleal.
El informe también subraya el aumento de la demanda de soluciones enfocadas en la eficiencia energética e hídrica. Productos como los sistemas automáticos de tratamiento del agua, robots limpiafondos, bombas de calor y cubiertas para piscinas se sitúan entre los más vendidos, en línea con la creciente concienciación sobre la sostenibilidad de las instalaciones.